La OTAN cree que la situación puede cambiar rápido en Sirte y Bani Walid

Bruselas, 13 sep.- La OTAN aseguró hoy que la situación en los alrededores de las ciudades libias de Sirte y Bani Walid -aún en manos gadafistas- es "muy volátil" y podría cambiar "rápido" a favor de los combatientes del Consejo Nacional de Transición (CNT).

"Es difícil predecir lo que va a pasar sobre el terreno", explicó el portavoz de la misión aliada, el coronel canadiense Roland Lavoie, quien consideró sin embargo que "hay potencial para un cambio rápido".

Lavoie indicó que hay una "concentración significativa" de fuerzas de los rebeldes en esas zonas y que, a tenor de lo ocurrido anteriormente en otros puntos de resistencia del antiguo régimen, los acontecimientos podrían desarrollarse rápidamente.

Acusó además a los combatientes fieles al huido líder Muamar el Gadafi de lanzar cohetes desde zonas pobladas del centro de la ciudad de Bani Walid, donde se registran en los últimos días los combates más duros.

La ciudad costera de Sirte -localidad natal de Gadafi- y el oasis de Bani Walid forman junto a Sebha el "triángulo" en el que las fuerzas gadafistas mantienen más capacidad.

Según la OTAN, sin embargo, en las últimas hora las cosas están cambiando en ese área y "ya no está claro" que los gadafistas tengan acceso a los principales ejes de comunicación.

Además, el portavoz aliado explicó que la organización ya no considera a Sebha como una ciudad bajo control de las fuerzas del régimen, sino "disputada", pues ningún bando "parece controlarla totalmente".

Por otra parte, la OTAN restó importancia al ataque llevado a cabo ayer por gadafistas en la localidad petrolera de Ras Lanuf, que se halla desde hace meses en poder de los rebeldes.

Según Lavoie, se trató de una acción "aislada" y que "no supone un avance territorial" para la resistencia.

En el ataque, llevado a cabo presuntamente por una veintena de hombres a bordo de varios coches procedentes del desierto, murieron al menos 15 soldados rebeldes.

La OTAN insistió hoy en que toda la estructura política y militar del antiguo gobierno se ha derrumbado y confió en poder poner fin "pronto" a sus operaciones aéreas, que por ahora siguen golpeando los focos de resistencia gadafista.

Además, volvió a repetir que no tiene informaciones sobre el paradero del dictador y que las fuerzas aliadas no van a tratar de encontrarlo, pues su mandato se centra en la protección de los civiles.

Lavoie confirmó que durante cierta parte del conflicto la OTAN tenía confirmación de los servicios de inteligencia de que Gadafi estaba en Trípoli, pero "desde hace un tiempo no ha dado señales de vida".