La reina Sofía inaugura congreso enfermedades neurodegenerativas y alzhéimer

  • La reina Sofía ha inaugurado hoy en Barcelona el II Congreso Internacional sobre Investigación e Innovación en Enfermedades Neurodegenerativas (Ciiien), organizado, entre otros, por la Fundación Reina Sofía, y ha asistido a varias sesiones en las que expertos internacionales han presentado y han debatido sobre patologías como el alzhéimer.

Barcelona, 22 sep.- La reina Sofía ha inaugurado hoy en Barcelona el II Congreso Internacional sobre Investigación e Innovación en Enfermedades Neurodegenerativas (Ciiien), organizado, entre otros, por la Fundación Reina Sofía, y ha asistido a varias sesiones en las que expertos internacionales han presentado y han debatido sobre patologías como el alzhéimer.

Doña Sofía ha seguido la presentación del doctor Michael Heneka, investigador de la Universidad de Bonn, y uno de los grandes expertos en alzhéimer, quien ha explicado que la inflamación tiene un papel activo en esta enfermedad.

Según Heneka, las microglias, unas células del sistema nervioso especializadas en el control inmunológico, contribuyen a la inflamación, y ha dicho que si se puede controlar esta inflamación de las neuronas del sistema nervios se podría mejorar la enfermedad.

El alzhéimer es un desorden neurodegenerativo progresivo que se caracteriza por la presencia de placas de proteína beta amiloide en el cerebro y que conlleva la perdida de la memoria, la capacidad de hablar, el control emocional y la habilidad de razonar y tomar decisiones.

También ha seguido la reina Sofía la presentación del doctor Anders Martin Fjell, de la Universidad de Oslo, que ha lanzado el mensaje de que los hábitos saludables son básicos para un envejecimiento sano y reducir el riesgo del alzhéimer, y ha hecho una visita a la zona de exposición de posters y trabajos presentados a este congreso, que reúne a más de 200 expertos.

Fjell ha lanzado el mensaje de que el ejercicio, una dieta moderada, evitar el uso de tóxicos, relacionarse con otras personas y dormir bien, son hábitos saludables que protegen contra esta enfermedad neurológica.

Antonio Andreu, director del Instituto de Salud Carlos III, que ha asistido al acto inaugural, ha destacado que el reto que plantean estas patologías es cómo luchar de forma eficiente contra el alzhéimer, una enfermedad que "es una carga significativa para el Sistema Nacional de Salud y para los familiares del paciente que ven cómo un ser querido se va sin irse, y se pierde en la bruma de lo desconocido".

Tras remarcar que la investigación es básica para avanzar en el conocimiento ha anunciado que para el año 2015 se mantiene presupuesto de Cibernet (Centro de Investigación en Enfermedades Neurodegenerativas), y que se podrán incorporar nuevos grupos para aumentar la masa crítica e impulsar la investigación.

Susana Camarero, secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, ha recordado que cada vez vivimos más tiempo y que se prevé que en España en el año 2050 las esperanza de vida de los hombres sea de casi 87 años, y de las mujeres más 90, y que el reto no es envejecer sino hacerlo con buena salud.

En este sentido, ha recordado que las mejoras en términos de esperanza de vida son el resultado del desarrollo y la consolidación del modelo de bienestar español, sin olvidar la influencia positiva de la dieta mediterránea.

También ha remarcado que para responder a los retos que hay en la prevención de las enfermedades neurodegenerativas, hay que poner en marcha acciones de innovación en ciencias de la salud.

Con el envejecimiento de la población aparecen las enfermedades neurodegenerativas, y de todas el alzhéimer es la que presenta una mayor incidencia en la población, y las lesiones cerebrales que la caracterizan, conocidas como placas de beta amiloide y ovillos neurofibrilares, aparecen décadas antes de que se produzca el diagnóstico.

En etapas tempranas el diagnóstico es difícil porque los síntomas clínico-patológicos son similares a otros tipos de demencia y los métodos de diagnóstico no son lo suficientemente sensibles, y en este sentido es necesario descubrir biomarcadores que permitan identificar y medir en vivo a los pacientes en riesgo, y poder intervenir en etapas tempranas de la demencia. EFE

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