Madrid, 19 jun.- La periodista "freelance" española Mónica Bernabé recorre la geografía y la historia reciente en su libro "Afganistán: Crónica de una ficción", en el que acerca al lector al convulso país de los talibanes, del que quieren salir jóvenes y extranjeros.
Bernabé, que trabaja como corresponsal para el diario "El Mundo" y colabora con otros medios desde que vive en Kabul en 2006, trata de explicar en el libro lo que en una crónica de urgencia o en cien artículos "es imposible por la complejidad" del asolado país.
En una entrevista con Efe, Mónica, como es conocida entre los colegas que visitan Afganistán y a ella acuden para pedir contactos, información o simplemente conocer lo último de lo que allí acontece, no es optimista respecto al futuro inmediato del país.
"La corrupción ahora creo que va a ir a más porque la gente ahora intenta aprovecharse porque ven que los extranjeros se van", explica
La única periodista española con base permanente en Afganistán considera que, diez años después del enorme despliegue internacional, el país asiático "tiene poca sostenibilidad sin la presencia internacional. Ese es el gran problema.".
"Se ha creado un país sobre pies de fango. Cuando se deje de llevar ayuda, Afganistán se hunde", advierte Bernabé, quien recuerda que "además se ha fomentado la cultura de la corrupción y el dinero fácil".
Cita como ejemplo que "antes un funcionario que no era corrupto se consideraba que era una persona respetable, ahora un funcionario que no es corrupto se considera idiota".
Mónica Bernabé subraya siempre que "en las estructuras de poder tienes lo peor de lo peor en la cima" y no ahorra críticas al protagonismo e impunidad de los "señores de la guerra" al tiempo que refleja bien la violencia, especialmente la doméstica, contra las mujeres, algo que -resume- no desaparece con el régimen talibán.
"La juventud toda quiere irse de Afganistán", explica la corresponsal barcelonesa, que advierte de que "la gente con formación, intelectuales, numerosos políticos, diputados, ministros ya tienen doble nacionalidad y un pasaporte estadounidense o alemán...".
Destaca como ejemplo de la pérdida de interés internacional en aquel país que la agencia estadounidense USAID "ya ha reducido la ayuda a la mitad" y subraya que Afganistán fue el pasado año el primer peticionario mundial de asilo en el exterior tras el anuncio formal de la retirada de tropas.
Del resultado de la abultada presencia militar extranjera y la proliferación de organizaciones no gubernamentales volcadas en Afganistán admite que "cambios ha habido, pues en Afganistán se partía totalmente de cero".
No obstante, aclara que "no había nada, (era) un país arrasado, era un auténtico desastre, ahora vas y sí que ha habido cambios con una cierta reconstrucción".
El reconocido fotoperiodista español Gervasio Sánchez ha escrito del libro que "da voz al pueblo afgano, se aleja de la manipulación mediática y revela la verdad sobre un conflicto que ha desacreditado la política intervencionista de Occidente".
Narrado a partir de las experiencia de Mónica Bernabé con la ONG que fundó y como corresponsal, el libro comienza con el primer viaje que hizo en el año 2000, cuando los talibanes gobernaban el país con mano de hierro y alcanza hasta los más recientes sucesos.
De la corresponsal, galardonada en 2010 con el Premio Internacional Julio Anguita Parrado, Gervasio Sánchez afirma que "ha realizado una de las mejores coberturas en zona de conflicto que recuerdo desde que empecé en este oficio".
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