Las Unidades de Protección del Pueblo (YPG) y sus aliados árabes expulsaron a los combatientes islamistas y otros insurgentes de la ciudad de Minnigh y tomaron el control de "más de la mitad" de la base aérea aledaña, en el norte de Alepo, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), que cuenta con una amplia red de informantes en toda Siria.
Los combates continuaban en el aeropuerto, la última base militar todavía controlada por los islamistas en la provincia de Alepo, dijo el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.
Las fuerzas del gobierno de Bashar al Asad habían perdido el control del aeropuerto de Minnigh en agosto de 2013.
Este avance de las fuerzas kurdas se produjo después de varios días de intensos combates.
Los rebeldes y los yihadistas combaten a la vez a las fuerzas kurdas, provenientes del oeste, y a las del régimen sirio, que lanzó una ofensiva en la provincia de Alepo con apoyo de la aviación rusa.
Más de 500 personas han muerto desde el inicio de esta ofensiva del régimen lanzada el 1 de febrero, indicó el miércoles el OSDH.
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