Los medios impulsarán la imagen corporal y hábitos de alimentación saludables

Barcelona, 29 feb.- Los medios de comunicación impulsarán una imagen corporal saludable y unos buenos hábitos de alimentación para prevenir trastornos alimentarios como la anorexia y la bulimia, que sufren el 6 % de las adolescentes y jóvenes españolas, y que son la tercera enfermedad crónica entre este colectivo.

El anuncio se ha realizado hoy en un acto celebrado en el Colegio de Periodistas de Cataluña al que han asistido representantes de la Academia de las Ciencias y las Artes de la Televisión, y de la Fundación IMA, que han elaborado un Decálogo de Buenas Prácticas para el Fomento de la Autoestima y la imagen corporal positiva en los medios.

Promover la diversidad corporal y respetarla es el objetivo de este decálogo, al que hoy se ha sumado el Colegio de Periodistas de Cataluña.

Desde estas entidades se ha apelado a la responsabilidad social de los medios de comunicación en la prevención de estos trastornos de la alimentación y a la necesidad de no fomentar un patrón de belleza de extrema delgadez y juventud que cada vez se aleja más de la morfología real de los españoles.

Josep Maria Martí i Martí, Decano del Colegio de Periodistas, ha ha mostrado su respeto por este código de buenas prácticas profesionales y más teniendo en cuenta, según ha dicho, que en los últimos años ha habido cierta laxitud en lo que se refiere a este tema.

El impulso de este decálogo es la primera iniciativa conjunta entre los medios de comunicación y los especialistas del ámbito de los trastornos de la conducta alimentaria para fomentar la prevención de estos trastornos y una imagen corporal en positivo.

En el decálogo se alude además a que hay que evitar la promoción de conductas que puedan ser de riesgo para el desarrollo de trastornos, como dietas sin informar de los peligros para la salud, y promover la autoestima más allá de lo físico.

También se recuerda que hay que promover estilos de vida saludables entre la población infantil, horarios restringidos como método de prevención de trastornos de la conducta alimentaria y obesidad, y proteger especialmente a la población adolescente, que es la más predispuesta a sentirse insatisfecha con el físico.