Los terroristas del 13-N no habían consumido drogas antes de los ataques

Los resultados de los exámenes toxicológicos de los nueve terroristas del 13 de noviembre y la prima de Abdelhamid Abaaoud muestran que no habían consumido drogas ni alcohol antes de perpetrar los atentados, según informa Le Parisien.

Los resultados de la pericia toxicológica desvelan un rastro de cannabis en la sangre de Brahim Abdeslam, lo cual se considera que puede resultar de uso regular. Asimismo, se encontraron restos de cocaína durante el análisis de Hasna Aït Boulahcen, prima de Abdelhamid Abaaoud.

Los exámenes se realizaron tras la declaración de varios testigos de los ataques acerca de la frialdad con la que actuaban los terroristas. Una de las hipótesis, reforzada tras el hallazgo de jeringuillas en un hotel en el que se alojaron los yihadistas dos días antes de la matanza, era que los terroristas podrían haber consumido Captagon, que se conoce ya como la 'droga de los yihadistas' y cuyo consumo vía intravenosa multiplica y acelera los efectos.

Captagon es el nombre comercial de la fenetilina, sintetizada por primera vez en 1961, aumenta los niveles de concentración, rendimiento y elimina la sensación de hambre y cansancio. Sin embargo, es su combinación con otras sustancias la que provoca ausencia de miedo, lo que podría haber ayudado a los terroristas a cometer los crímenes.

Las dosis de Captagon, cuyo precio ronda entre los 5 y los 20 dólares, comenzaron a consumirse en las fiestas de niños procedentes de familias acomodadas en el Golfo Pérsico. Actualmente su mayor productor es Siria, donde la consume un gran número de yihadistas.