Madrid. Un experto en educación advierte de que “cambiar unas asignaturas por otras” en la carrera “no servirá de nada”


El catedrático de Teoría de la Educación de la Universidad Complutense de Madrid, Gonzalo Jover, declaró este lunes a Servimedia que “cambiar unas asignaturas por otras” en la carrera de Magisterio “no es la solución mágica” que elevará el nivel de los futuros maestros y, de hecho, “no servirá de nada”.
Jover hizo estas afirmaciones en referencia al anuncio de que el Gobierno regional quiere impulsar una reforma de los estudios de Magisterio para que materias como Matemáticas, Inglés o Lengua tengan más peso relativo en el currículum frente a otras como Historia de la Educación, Cultura y Familia y similares.
Según Jover, “es cierto que los alumnos llegan con una falta de cultura general significativa, pero esto no ocurre solo en Magisterio, sino que es una queja generalizada entre los profesores de Universidad”.
Así, sugirió como posible solución una prueba de conocimientos generales “pero no al final, sino como extra para ingresar en la facultad”.
El catedrático destacó no obstante que “nunca se ha debatido en serio sobre los planes de estudio de Magisterio, que, en el fondo, siguen igual desde 1970”, por lo que “abrir el debate sí resulta conveniente”.
“Ahora bien”, prosiguió, se critica “la falta de cultura” de los alumnos y se lamenta “el peso excesivo de asignaturas que lo que hacen es dar una formación y una visión integral del sistema educativo” porque, según la Comunidad, el 80% de los que participaron en la Oposición a Primaria e infantil suspendieron el examen de Conocimiento General.
“Si (al presidente) González, la solución que se le ocurre es reforzar materias instrumentales (Matemáticas, Inglés, Lengua...)” cabría entonces preguntarse “si su sistema de colegios bilingües funciona bien”, declaró.
CONTRADICCIONES
Jover dio por cierto que “nos quejamos de que los estudiantes llegan con pocos conocimientos teóricos a la Universidad”, hecho que achacó a que “en la actualidad el saber y el gusto por el saber están desprestigiados”, subrayó.
Por eso, “resulta contradictorio” que la Comunidad lamente esta carencia y luego apueste siempre por lo mismo, “los saberes instrumentales”, señaló.
Sí defendió Jover la necesidad de replantearse los planes de estudio de Magisterio, ya que por ejemplo, “no tiene mucho sentido la ruptura tan radical (en cuanto a formación) que existe entre los que imparten Primaria y Secundaria”.
Finalmente, Jover resaltó que los grados de Magisterio (impuestos tras la implantación de Bolonia) no se pueden juzgar a la luz de las citadas oposiciones, ya que es “demasiado pronto y la primera generación acaba de terminar.

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