Maestros y obreros protestarán en Honduras contra violencia y alza de precios

  • Maestros, sindicalistas y campesinos, entre otros sectores, protestarán mañana en algunas de las principales ciudades de Honduras contra el alto costo de los alimentos y la violencia, que está causando a diario una veintena de muertos en el país, informó hoy una fuente magisterial.

Tegucigalpa, 31 oct.- Maestros, sindicalistas y campesinos, entre otros sectores, protestarán mañana en algunas de las principales ciudades de Honduras contra el alto costo de los alimentos y la violencia, que está causando a diario una veintena de muertos en el país, informó hoy una fuente magisterial.

"Vamos a protestar por el alto costo de los alimentos, combustibles y servicios públicos y, además por otras conquistas sociales que el Gobierno no quiere reconocer", dijo a Efe el presidente del Colegio de Pedagogos de Honduras, Joel Espinal.

Agregó que durante la protesta exigirán al Gobierno que preside Porfirio Lobo que "cese la violencia" en Honduras, que en 2011 registró una tasa anual de homicidios de 86,5 por cada 100.000 habitantes, según el estatal Comisionado de los Derechos Humanos.

En Tegucigalpa, la marcha convocada por las principales centrales obreras y dirigentes magisteriales partirá de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán hasta el Parlamento, en el centro de la capital hondureña.

También se pronunciarán contra la pobreza, la falta de tierras para los campesinos, la injusticia, el desempleo y otros problemas que afectan a los hondureños, indicó Espinal.

Los maestros exigen el pago de salarios atrasados, algunos desde 2010, la derogación de la Ley Fundamental de Educación y la nueva Ley del Instituto de Previsión del Magisterio (Inprema).

Los educadores rechazan la Ley del Inprema por considerar que les afecta el aumento al monto de las cotizaciones y la edad para jubilarse.

Por su parte, los campesinos demandan una solución al conflicto agrario en el departamento caribeño de Colón, donde en los últimos tres años han sido asesinadas cerca de 70 personas, la mayoría campesinos, pero también han muerto de forma violenta guardias de seguridad privada.

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