Solo tres habitantes del complejo residencial Wei-kuan en la ciudad meridional de Tainan seguían desaparecidos cuando los socorristas se disponían a concluir su misión después de haber sacado a más de 280 personas de entre los escombros.
El balance de muertos por el terremoto de magnitud 6,4 asciende a 114, según la Agencia Nacional de Incendios. Otras 550 personas resultaron heridas.
Wei-kuan, un rascacielos de 16 pisos, fue el único edificio que se vino abajo por el terremoto del pasado sábado, y las autoridades abrieron una investigación para determinar si tenía algún defecto de construcción.
El promotor inmobiliario del edificio que se terminó de construir en 1994, Lin Ming-hui, y dos de sus empleados, se encuentran detenidos por presunta negligencia profesional con resultado de muerte.
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