Mensajeros de Paz despide a 6 niños haitianos que llegaron a España enfermos

Madrid, 11 feb.- El presidente de la ONG Mensajeros de la Paz, el Padre Ángel, ha despedido hoy en el aeropuerto de Madrid a un grupo de seis niños haitianos con enfermedades pulmonares, de movilidad y de la vista, de las que han sido tratados durante 3 meses en España, en lo que el responsable de la organización ha calificado de "un regalo para ellos y nosotros".

Estos 6 niños ha sido el primero grupo de los 20 que viajarán para curarse de "la enfermedad de la pobreza, de la tristeza y del miedo" y que no tenían "ni siquiera un colchón donde dormir y los mosquitos no les dejaban tranquilos", según ha explicado el Padre Ángel a EFE.

En enero de 2010, Haiti sufrió un terremoto de gran magnitud, que ocasionó cerca de 300.000 muertos y 1,5 millones de damnificados.

"Ahora se van felices y bien contentos, en lo que ha sido un regalo para nosotros y para ellos porque ven que hay gente que les quiere", asegura el Padre Ángel sobre estos niños, quien agrega que se marchan cambiados "y que entre la tristeza de que se marchan, está la alegría de verles distintos".

El Padre Ángel resalta que todo ello se debe a la solidaridad de muchos ciudadanos.

"Una solidaridad que está en boga y que no se ha perdido por mucha crisis que haya", indica a EFE.

El religioso ha acudido hoy al aeropuerto para despedir a estos niños, dos chicos y cuatro chicas de edades entre los tres y los trece años, que viajaron desde Haití acompañados de sus progenitores.

Llegaron a Madrid el pasado 14 de noviembre y desde entonces "han experimentado un profundo cambio físico y emocional", según relata a EFE Vicente Álvarez, director general de Mensajeros de la Paz.

"Además de las enfermedades de las que han sido tratados, llegaron a España con problemas de desnutrición y raquitismo, y durante estos meses han engordado", indica.

Las niñas han sido operadas de cataratas (Iselor y Benchina, de 4 y 1 año) y son las que han experimentado los cambios más "impresionantes" ya que cuando estaban en Haití "sólo veían bultos y sombras y sus compañeras tenían que llevarlas de la mano para ir a clase".

En cuanto a los niños, el caso más complejo ha sido el de Jeerlly, de once años, quien llegó en una silla de ruedas "y ahora puede caminar ayudado por un andador, aunque tendrá que seguir haciendo rehabilitación durante mucho tiempo en Haití", según Álvarez.

Todos los niños estarán escolarizados y a su regreso a Haití se les incluirá en programas nutricionales y de seguimiento.

La llegada de un segundo grupo está prevista para marzo y estará compuesto, previsiblemente, por otros seis niños afectados por hernias inguinales y problemas motores y de visión.

El Gobierno de Haití entregó ayer una condecoración especial al que fuera embajador de España en ese país, Juan Fernández Trigo, en reconocimiento a su labor de defensa de la transparencia durante las últimas elecciones, que llevaron al poder al presidente Michel Martelly.