Mujica cree que la baja natalidad es amenaza y pide facilitar la inmigración

Montevideo, 12 ago.- El presidente de Uruguay, José Mujica, dijo hoy que el envejecimiento de la población es el principal problema estratégico al que se enfrenta el país a medio plazo; y ha ofrecido a todas las fuerzas políticas un gran pacto nacional para facilitar la inmigración y la residencia.

Durante una audición emitida en Radio Uruguay, Mujica ha aseverado que la evolución demográfica del país es "peligrosa", puesto que se registran pocos nacimientos, a la par que se incrementa el "sector pasivo".

Ante este fenómeno, ha realizado un llamamiento al consenso político para aprobar los cambios legislativos y constitucionales correspondientes para simplificar el acceso de los ciudadanos del Mercosur a la residencia uruguaya.

Para el presidente, de la aprobación de estas medidas dependerá la estabilidad futura del país, de ahí que haya lamentado que el tema no se discuta en la campaña electoral para las elecciones del próximo 26 de octubre.

"Es un tiro contra nosotros mismos las dificultades que les ponemos a los vecinos en materia de residencia; y eso en parte se puede arreglar si cambiamos el mecanismo" para facilitar la inmigración, "como en tiempos de nuestros bisabuelos", ha apuntado.

Junto a estos cambios normativos, ha considerado importante el que se incremente la productividad del sector activo, lo que, a su juicio, se logrará con un aumento de la inversión y con una mejora de la instrucción de los trabajadores.

En un discurso radiofónico de marcado carácter social, el mandatario uruguayo ha hecho un alegato en favor de la justicia social y la distribución de la riqueza, máxime dentro de un subcontinente como Latinoamérica, que es "el que peor reparte del mundo".

"No se puede pretender tener una sociedad tolerante" y de buena convivencia "si en esa sociedad no repartimos. Esto no es un derecho para los pobres. Es un derecho para todos", ha argumentado.

En su locución, Mujica también se ha posicionado a favor de la mejora del salario y las condiciones de trabajo de los campesinos, acciones que su Gobierno ha fomentado en Uruguay y que han "cambiado lentamente la vida de muchos hombres campo", después de "un olvido de casi 100 años", ha incidido.