Ocho policías y 2 civiles mueren en un ataque maoísta en el norte de la India

  • Al menos ocho policías y dos civiles han muerto, y otras dos personas resultaron heridas en un ataque de la guerrilla maoísta contra un diputado, que salió ileso, en la región norteña india de Jharjand, informan hoy medios locales.

Nueva Delhi, 4 dic.- Al menos ocho policías y dos civiles han muerto, y otras dos personas resultaron heridas en un ataque de la guerrilla maoísta contra un diputado, que salió ileso, en la región norteña india de Jharjand, informan hoy medios locales.

El diputado Inder Singh Namdhari regresaba en coche anoche a la localidad de Chatra tras inaugurar un colegio en el vecino distrito de Latehar, cuando los maoístas atacaron su convoy, dijo el superintendente de Policía Rahul Purwa a la agencia IANS.

"Los maoístas primero activaron una mina y después dispararon contra el convoy. Un autobús llenos de civiles quedó atrapado en el fuego cruzado, en el que algunos de ellos murieron", añadió Purwa a ese medio indio.

El propio Namdhari, citado por distintos medios, relató que su conductor optó por no detener el vehículo al escuchar la explosión, y que fue el automóvil que les escoltaba el que sufrió de lleno la emboscada.

Fuentes policiales precisaron a la agencia india PTI que de los ocho policías fallecidos, seis murieron en el lugar del ataque y dos sucumbieron a las heridas horas más tarde en el hospital.

Según informes policiales citados por ese medio, un centenar de maoístas se reunieron el viernes en Latehar y se propusieron vengar la muerte hace diez días del líder maoísta Koteshwar Rao, alias "Kishenji", en la limítrofe región de Bengala Occidental.

La guerrilla maoísta tiene sus bastiones en el llamado "cinturón rojo" de la India, una franja de territorio que recorre el centro y el este del país en la que cuentan con campos de entrenamiento.

El Gobierno de la India ha declarado a los rebeldes maoístas como la principal amenaza para la seguridad interna.

Conocidos en la India como naxalitas tras protagonizar una revuelta en la aldea bengalí de Naxalbari en 1967, los maoístas luchan por una revolución agraria de corte comunista.

Las autoridades cifraron en 1.169 las víctimas mortales registradas en 2010 en los enfrentamientos armados entre las fuerzas de seguridad y estos insurgentes, que buscan el apoyo del campesinado para lograr sus objetivos.

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