El abogado del parricida de Carabanchel cree que 20 años de prisión sería una "cantidad razonable"

En declaraciones a los medios a las puertas de la Audiencia Provincial de Madrid, Sánchez ha manifestado que Jorge Diego C., el cual ha reconocido la culpabilidad de los hechos, estaba "más entero" cuando ha empezado la sesión, en la que ha manifestado que "en ningún momento" se le pasó por la cabeza "hacerles daño" y que "jamás" pensó en hacerlo "premeditadamente".

El letrado ha explicado que 20 años de condena a su cliente sería una "cantidad razonable" si bien éste se enfrenta a una petición fiscal de 21 años de prisión por un delito de asesinato y otro en grado de tentativa. La acusación particular, que representa a la familia, eleva la solicitud a 25 años de cárcel por asesinato, y 18, por esta infracción penal en grado de tentativa.

Precisamente sobre la declaración de la madre de los hijos y la hermana de ésta afirma que no ha quedado "nada claro". "Creo que incluso nos puede favorecer que digan que no tenían claro si iba o no bebido. Ellas dicen que va bebido pero parece una estrategia procesal el decir que no lo estaba", ha indicado.

Así las cosas, ha lamentado que la madre de los hijos y expareja de Jorge Diego haya denunciado que existe agresión e incluso violación. "Estamos hablando de cuestiones muy fuertes. Ya no es una agresión que pueda ser un bofetón sino que hablamos de violaciones. ¿Si te han hecho eso por qué no lo has denunciado? Porque realmente es algo muy grave", ha agregado.

En el banquillo, el presunto asesino se ha mostrado tranquilo y atento a lo manifestado en las cuestiones previas al juicio. En ellas se ha acordado que conste la prueba constituida sobre la declaración de su hijo para evitar que tenga que recordar los trágicos hechos ocurridos el 28 de abril de 2014.

En el momento de los hechos sufría un trastorno psicótico producido por la ingesta de alcohol y ansiolíticos. Tras el crimen, dejó una carta explicando los motivos: "Los he matado por su bien, para que no sufran como yo y no vivan la vida que vive su madre". El acusado llegó a intentar suicidarse en dos ocasiones, una de ellas en el calabozo.