¿Por qué se vuelcan con los refugiados? Alemania no olvida que sufrió un muro

    • "Cuando era niño, yo también tuve que dejar mi casa y llegué con las manos vacías al oeste de Alemania", cuenta Hans Köpke, un jubilado que dona juguetes en un centro.
    • Con más terror que alegría, los alemanes no olvidan el Muro que dividió el país durante 28 años y no quieren que la historia vuelva a abochornar a Europa.

Oscar Wilde escribió que "el único deber que tenemos con la historia es reescribirla". Alemania que vivió el horror y el terror de vivir separada por un muro está dando una lección de generosidad y compromiso a sus socios europeos en la gestión de la crisis migratoria. Como ya ocurriera con la crisis financiera, Berlín se echa sobre los hombros la gestión de este asunto y pide medidas ya. Con más terror que alegría, los alemanes no olvidan el Muro que divididió el país durante 28 años y no quieren que la historia vuelva a abochornar a Europa.

Durante casi 30 décadas, primero como un kilométrico de rejas y luego como una enorme pared, Alemania vio desesperados intentos masivos de fuga de ciudadanos del lado oriental hacia el extremo occidental. Similar a los rostros e historias que hoy vuelven a abrir informativos.

Según las cifras oficiales, más de 5.000 personas trataron de cruzar el muro, de las que más de 3.000 fueron detenidas. El anhelo de otra vida lejos de la miseria costó la vida a 239 alemanes. Quizás, porque saben que es la desesperación y porque los errores históricos no hay que repetirlos, Berlín pide ya un reparto de los refugiado entre los socios europeos.

Esta crisis está mostrando otra cara, hasta ahora desconocida de Angela Merkel. La canciller creció como hija de un pastor protestante nacido en Alemania Occidental que decidió criar a su familia al otro lado del muro. Una decisión que marcó el carácter de la canciller y que quizás, la actual crisis le haga retroceder a aquellos sombríos años.

La cara solidaria de los alemanes está sorprendiendo al mundo. Atrás quedaron aquellos años en los que criticaron el despilfarro y falta de austeridad de los países del sur. Los alemanes, probablemente porque no olvidan el muro, están recibiendo con los brazos abiertos a los refugiados sirios. "Nosotros, los alemanes del Este que sobrepasamos los 70 años sabemos que es ser refugiados. Cuando era niño, al finalizar la guerra, yo también tuve que dejar mi casa y llegué con las manos vacías al oeste de Alemania, ahora pasa los mismo", señala en El País Hans Köpke.

"¡Alemania, solo Alemania!", corean los refugiados en Budapest. El gobierno germano dijo el mes pasado que espera hasta 800.000 solicitantes de asilo este año, cuatro veces más que en 2014. A la estación principal de Munich, decenas de refugiados llegan cada día. Alrededor de 2.000 refugiados procedentes de Hungría o Viena están llegando a la estación central de Munich donde la ayuda y el respaldo de los alemanes está sorprendiendo a las autoridades que a través de twitter piden que no lleven más juguetes y donaciones para los que llegan anhelando Eldorado europeo.Please do not bring any more goods for the Moment.The donations at hand will be sufficient for the refugees present and arriving today.— Polizei München (@PolizeiMuenchen) septiembre 1, 2015Este mega desafío necesita una mega solución

La canciller alemana, Angela Merkel, aseguró este lunes que, pese a que algunos se oponen, hay que ser flexibles a la hora de hacer frente a esta crisis que es la mayor oledada de refugiados desde el fin de la II Guerra Mundial. El ministro de Interior de Alemania, Thomas Maiziére, planea modificar la Consititución a fin de responder rápidamente a esta crisis.

Así lo explicó en une entrevista en el semanario Die Zeit: "Vamos a tener que adaptarnos a cambios en todos los lugares: en la escuela, en la policía, en la construcción de viviendas, en los juzgados, en el ámbito sanitario, en todas las partes. Y eso hay que hacerlo en muy poco tiempo", aseguró. La propuesta del ministro de interior alemán recibió el apoyo del CSU quien aseguró que ante este mega-desafío se necesita una mega-solución. La CDU apuesta por modficar la ley de inmigración. Así, pide que se conceda el derecho permenente a los refugiados que culminen sus estudios en el país. Son medidas nuevas para nuevos desafíos.

Sin embargo, Alemania es consciente del efecto llamada que puede ejercer su regulación respecto al asilo. Para evitar que el fenómeno migratorio siga aumentando, el ejecutivo alemán presentará un proyecto de ley que busca garantizar las deportaciones contra quienes no obtengan asilo o sean considerados inmigrantes económicos.

En el proyecto se descarta la posibilidad de otorgar tarjetas donde se brinde asistencia sanitaria gratuita, ya que podría suponer un fuerte incentivo para pedir asilo. Asimismo, consideran fuera de lugar que quienes solicitan refugio en Alemania reciban un permiso de trabajo de forma inmediata por lo que insisten en reducir los plazos de resolución de estos documentos.

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