Primeras piedras en el camino hacia Oslo y La Habana

Bogotá, 6 sep.- Las FARC plantearon hoy sus ideas respecto al diálogo de paz que comenzará el 8 de octubre en Oslo, entre ellas la de incluir como negociador a un dirigente guerrillero que cumple condena en EE.UU., a lo que el Gobierno colombiano respondió pidiendo realismo para que el proceso no naufrague antes de empezar.

Un día después que el Gobierno, representantes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunciaron la lista de sus negociadores y dijeron que su prioridad nada más iniciar las negociaciones será lograr un alto el fuego bilateral.

El equipo estará encabezado por "Iván Márquez" y "José Santrich", alias de Luciano Marín Arango y Bertulfo Álvarez, dos pesos pesados de las FARC, según dijeron hoy representantes de la guerrilla en una rueda de prensa en La Habana.

La sorpresa fue que propusieron que sea también negociador "Simón Trinidad", extraditado a EE.UU. en 2004 por terrorismo y narcotráfico y condenado a 60 años de cárcel por el primero de esos motivos en 2008.

Para que pudiera dejar la cárcel, sería necesario un permiso del Gobierno de Barack Obama y la venia del Gobierno colombiano.

"Simón Trinidad", alias de Ricardo Palmera, va a "estar como integrante de la delegación en la mesa independientemente de las molestias que le pueda causar a quien le pueda causar", advirtió el guerrillero "Marco León Calarcá", alias de Luis Alberto Albán.

El proceso de paz debe "ser realista" y que "hay cosas que se pueden y otras que no", respondió el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, en unas breves declaraciones sobre lo que parece ser la primera piedra en el camino hacia Oslo.

El Departamento de Estado de EE.UU. rechazó hacer cualquier tipo de comentario al respecto y derivó las preguntas de los periodistas al Departamento de Justicia, que aún no se ha pronunciado sobre el asunto.

Una de las abogadas defensoras de "Simón Trinidad" en EE.UU., Laurie Quince, explicó hoy a Efe que en términos legales "es imposible" que éste pueda participar en las negociaciones de paz.

"Supongo que la única vía, si es que existe, sería diplomática. No conozco todas las excepciones de la ley, pero este caso en términos legales ya agotó todas las apelaciones posibles y la justicia en este tipo de situaciones es muy estricta", añadió.

"Simón Trinidad" fue condenado a 60 años de cárcel en EE.UU. por el secuestro de tres estadounidenses contratistas del Pentágono que fueron liberados en la Operación Jaque en 2008 junto a Ingrid Betancourt.

Además, fue sometido a dos juicios por narcotráfico, pero fueron declarados nulos.

El diálogo entre el Gobierno y las FARC, fruto de un acuerdo suscrito en La Habana el 26 de agosto pasado al cabo de medio año de conversaciones exploratorias, continuará, después de su apertura formal en Oslo, sus trabajos en Cuba, cuyo gobierno es garante del proceso junto al de Noruega.

La rueda de prensa de los representantes de las FARC, generó también reacciones adversas en Colombia por la afirmación de los guerrilleros de que ya no tienen a nadie "retenido", según las palabras de "Mauricio Jaramillo", alias de Jaime Alberto Parra.

Ante las preguntas de los periodistas, en algunos casos por personas concretas que están desaparecidas, el guerrillero subrayó que "en Colombia secuestran los órganos de seguridad, los paramilitares, la delincuencia común y todo quien lo hace imputa esos secuestrados a las FARC".

Exrehenes, personas con familiares secuestrados y organizaciones como País Libre, que dirige la exrehén Clara Rojas, criticaron a la guerrilla y le reclamaron sinceridad.

"Las FARC deben decir a la sociedad colombiana antes del 8 de octubre qué pasó con los secuestrados que no han regresado, si aún están vivos o murieron en cautiverio o si fueron asesinados y devolver sus cadáveres", dijo a Efe el exdiputado regional Sigifredo López, quien fue rehén de esa guerrilla casi siete años.

López consideró que "un proceso tan importante no debe hacerse sobre la base de la mentira".

"Las víctimas exigimos verdad, que nos digan dónde están los cadáveres para ir por ellos", agregó.

Marleny Orjuela, cabeza de la Asociación Colombiana de Familiares de Miembros de la Fuerza Pública Retenidos y Liberados (Asfamipaz), dijo también a Efe que actualmente esa organización sabe que no hay "militares ni policías vivos secuestrados", aunque admitió que "sí se sabe que hay uniformados desaparecidos".

La también exrehén de las FARC Clara Rojas, actual directora de País Libre, una organización de lucha contra el secuestro y asistencia a las familias, dijo sentirse "desconcertada" con la afirmación de los guerrilleros en Cuba.

"Me dejó sin palabras. No es respuesta a familiares que reciben esa afirmación con inmenso dolor", dijo Rojas, quien confía en que los mandos rebeldes recapaciten.