Refuerzan diálogo para pacificación ante acciones de pandillas en El Salvador

San Salvador, 23 abr.- El Gobierno, las iglesias y sectores sociales de El Salvador iniciaron hoy una nueva etapa de un diálogo que busca definir una "hoja de ruta" para alcanzar la pacificación del país, agobiado por la violencia de pandillas, informó una fuente oficial.

El ministro de Justicia y Seguridad Pública, Ricardo Perdomo, explicó que, aunque esa fue la primera reunión formal, "no se está partiendo de cero" porque desde hace varios meses comenzó el proceso con el fin de elaborar "políticas de seguridad sostenibles en el tiempo".

"No es una negociación entre la sociedad y las pandillas", sino que "simplemente es un diálogo entre todos los sectores de la sociedad que se van a comprometer a resolver los problemas del país" en materia de seguridad, aseguró el funcionario.

Perdomo sostuvo que "el Gobierno nada más tiene un papel de facilitador (y) es la sociedad organizada la que va a desarrollar este amplio diálogo nacional".

Además de Perdomo y otros funcionarios de Seguridad, en el encuentro participaron representantes de las iglesias católica, evangélica y anglicana, entre otras, así como de fundaciones privadas y del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), que brinda apoyo técnico al proceso.

Las autoridades han mantenido reuniones preliminares con dichos sectores desde hace unos ocho meses, al igual que con las alcaldías.

Perdomo explicó que "este plan de pacificación nacional va por etapas" y que, tras suspenderse por las pasadas elecciones presidenciales, con la reunión de hoy "se está ya impulsando la siguiente etapa, que es la integración de los diferentes actores que trabajan por la prevención de la violencia".

El proceso toma relevancia en momentos en que las pandillas han incrementado los asesinatos en el país a pesar de una "tregua", o acuerdo para que sus miembros no se maten entre sí, pactada en marzo de 2012.

Las autoridades atribuyen el alza en los homicidios principalmente a pugnas internas entre las pandillas, que también aumentan sus ataques armados contra los policías.

El obispo auxiliar de San Salvador, Gregorio Rosa Chávez, quien representó a la Iglesia católica en la reunión, comentó que hay "un desencuentro" entre el Gobierno del presidente saliente de El Salvador, Mauricio Funes, y los mediadores de la "tregua", pero no entró en detalles al respecto.

Los mediadores del pacto de pandilleros son el obispo castrense, Fabio Colindres, y el exdiputado del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) Raúl Mijango.

El Gobierno de Funes sostiene que no negoció con las pandillas para que dejaran de matar y que sólo es "facilitador" de la "tregua", que según las autoridades al principio bajó el promedio diario de homicidios de alrededor de 14 a 5,3.

Sin embargo, en las últimas semanas los asesinatos han subido a 9,9, diarios, según el Instituto de Medicina Legal.

Rosa Chávez indicó que en próximas reuniones con el Gobierno y los demás sectores se definirán los objetivos específicos, la metodología y la estructura de la organización que impulsará el proceso de "pacificación".

"No esperamos resultados de cortísimo plazo dentro del proceso de dialogo (...), nosotros como Gobierno seguimos haciendo nuestro trabajo, con nuestros planes de represión, prevención y reinserción" de delincuentes, señaló por su parte el ministro Perdomo.

Representantes de varias iglesias, entre ellos el obispo castrense que es mediador de la "tregua", propusieron el martes al nuevo Gobierno salvadoreño, que asumirá el 1 de junio próximo, que promueva un diálogo con las pandillas.

Funes entregará el poder el 1 de junio a Salvador Sánchez Cerén, su vicepresidente que ganó los comicios del pasado 9 de marzo.