En un primer momento, el gobierno había negado la visa a los familiares de Hassan Asif, un hombre de 25 años, que sufre de un cáncer terminal y tiene solo algunas semanas de vida más.
El gobierno había rechazado el pedido de visa de su madre y su hermano aduciendo que podían aprovechar la ocasión para quedarse en Australia.
Esa decisión provocó una ola de protestas y la Melbourne City Mission, refugio para gente sin vivienda, exhortó al ministro de la Inmigración, Peter Dutton, que "tuviera compasión".
"Hassan corre el riesgo de morir solo porque los servicios de inmigración le niegan una visa a su madre", escribió el establecimiento en su página Facebook.
"Exhortamos a Peter Dutton a que intervenga y dejar que la familia se reúna una última vez", agregó.
La oposición laborista por su parte había criticado una "decisión escandalosa y despiadada".
El miércoles por la mañana, Dutton confirmó la decisión de los servicios de inmigración diciendo que era "una buena decisión".
Sin embargo, media hora después, en un sorprendente cambió de posición, Dutton anunció que las visas habían sido otorgadas.
"Pedí a nuestra delegación en Islamabad que examinara el caso y aportara informaciones suplementarias. Eso se hizo y las visas fueron aprobadas", declaró el ministro.
mp/iw/bfi/ros.zm/meb
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios