Un 5 % de la población de entre 15 y 64 años puede ser bebedora de riesgo

Madrid, 28 abr.- Se estima que alrededor del 5 por ciento de la población de entre 15 y 64 años puede ser bebedora de riesgo por la cantidad de alcohol que consume, según se ha puesto de relieve en la III Jornada sobre Alcohol y Alcoholismo de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI).

La gravedad de los daños que ocasiona el consumo de alcohol depende de muchos factores; además de la cantidad que se bebe, también influyen el sexo, los determinantes genéticos o las infecciones, ha informado esta sociedad científica en un comunicado.

Uno de los daños más comunes son las inflamaciones del hígado. Según el doctor Antonio J. Chamorro, coordinador del Grupo de Alcohol y Alcoholismo de la SEMI, "en la hepatopatía alcohólica (la inflamación del hígado a causa del alcohol), que es probablemente la complicación más estudiada, se sabe que aproximadamente un 15-20 % de los pacientes desarrollan hepatitis alcohólica o cirrosis.

Los principales órganos afectados por el consumo crónico de alcohol son el hígado, el sistema nervioso (cerebro y nervios) y el corazón y en todos ellos, la inflamación juega un papel muy importante en el desarrollo del daño ligado al consumo, ha señalado.

Los expertos continúan estudiando por qué algunas personas que consumen alcohol de forma crónica desarrollan adicción o determinadas complicaciones, como el daño hepático, y otras no.

También en los últimos años se han desarrollado nuevas vías de investigación en relación con el daño neuronal y concretamente la neuroinflamación producida por el alcohol, de gran importancia dado que está asociada con el consumo intensivo.

Aunque según los datos de la última Encuesta Domiciliaria sobre Alcohol y Drogas en España (EDADES) que realiza el Plan Nacional sobre Drogas, la tendencia está estabilizada, el tipo de consumo ha cambiado, al pasar de un modelo "mediterráneo" (diario en poca cantidad) a uno "anglosajón", en atracón o "binge drinking" durante los fines de semana".

El Grupo de Alcohol y Alcoholismo de la SEMI está llevando a cabo un estudio sobre el síndrome de abstinencia alcohólica en pacientes hospitalizados y otro sobre las personas que han recibido tratamiento por un trastorno producido por alcohol.