Un Campeonato Nacional de Siesta analiza esa costumbre tradicional

Madrid.- Una copiosa comida tras un viaje de placer incitó a un grupo de amigos a hacer uso de la tradicional siesta, que, lejos de los veinte minutos que recomiendan los expertos, duró casi dos días en uno de los casos, hecho que ha dado lugar al "I Campeonato Nacional de Siesta", que se celebra estos días en Madrid.

Así lo ha explicado a Efe el presidente de la Asociación de Amigos de la Siesta, David Blanco, que advierte que la sociedad moderna "esta perdiendo este hábito saludable que no sólo es una costumbre española, sino muy latina".

Blanco asegura que la siesta es "el deporte nacional español" y que se siente como un "caballero" que defenderá "a capa y espada" este hábito, junto a los demás miembros de la asociación nacional.

El campeonato, desde hoy y durante varios días, contará con la participación de cerca de 360 personas que competirán por ser "Campeón Nacional de Siesta", en rondas de 20 minutos y que ganará la persona que duerma más y mejor.

El encargado de valorar quien gana cada una de las rondas será la doctora Lila Chuecas, que certificará en qué momento empieza el sueño y durante cuánto tiempo se prolonga con la ayuda de un pulsómetro digital, que llevarán los participantes y que mide su ritmo cardiaco.

Chuecas asegura que los efectos que la siesta produce a corto plazo son múltiples ya que permite recargar energía y relajarse "lo que mejora nuestra capacidad de aprendizaje", además de mejorar nuestro ritmo cardiovascular, a medio y largo plazo, "para una mejor calidad de vida".

Esta competición no solo califica la calidad y duración del sueño, sino que también premiará otros aspectos relacionados con el "arte del sueño" como la vestimenta más creativa, la posición a la hora de dormir más original e incluso habrá un favorito del público.

Un aspecto muy unido a la siesta que también tiene calificación y premio será el ronquido emitido por la persona que duerme, función juzgada por un aparato encargado de medir los decibelios emitidos por el participante.

Así, los organizadores también han pensado en los participantes "más sensibles", que podrán contar con tapones para los oídos e incluso antifaces, pero tendrán que tener en cuenta que utilizarlos resta puntos.

El ganador de este certamen no solo será el primer campeón nacional de siesta, sino que obtendrá un trofeo y un premio en metálico, como el segundo y tercer clasificado, así como el primer y segundo ganador de cada ronda clasificatoria y los de cada categoría.