Unos 100 agentes vigilan en Melilla para evitar polizones en las atracciones

  • Unos cien agentes de la Guardia Civil y Policía Nacional componen en Melilla el dispositivo de la denominada "Operación Feriante", un despliegue policial que trata de evitar la salida de inmigrantes como polizones, ocultos en las atracciones de la feria que acaba de finalizar.

Melilla, 8 sep.- Unos cien agentes de la Guardia Civil y Policía Nacional componen en Melilla el dispositivo de la denominada "Operación Feriante", un despliegue policial que trata de evitar la salida de inmigrantes como polizones, ocultos en las atracciones de la feria que acaba de finalizar.

Desde las cinco de la madrugada, agentes de la Policía Nacional peinan el recinto ferial y realizan un registro previo al que, posteriormente, lleva a cabo la Guardia Civil en el interior del puerto.

En las primeras horas de la "Operación Feriante" ya se han llevado a cabo diversas localizaciones, algunas en el recinto ferial y otras en la zona previa al embarque de los vehículos en los ferries que enlazan con la península.

En concreto, por parte de la Guardia Civil se ha hallado dentro del puerto, no de las atracciones, a seis personas, de ellas cuatro menores, que tenían la intención de ocultarse en alguno de los camiones para poder viajar como polizones.

No obstante, el balance es aún muy provisional, ya que sólo han salido de la ciudad tres atracciones en un primer barco que enlaza Melilla con Motril (Granada).

Está previsto que en el próximo buque, el de Almería, salgan otras ocho atracciones y, en el siguiente, con destino Málaga, alrededor de una treintena.

La "Operación Feriante" continuará mañana y no se dará por cerrada hasta que salga de Melilla el último camión con atracciones que han participado en los festejos patronales de la ciudad.

La misión del dispositivo es doble: luchar contra la inmigración irregular, así como velar por la integridad física de aquellos que se introducen en completos amasijos de hierros, lugares en los que ponen en riesgo su integridad física.

Con todo, los intentos por parte de personas indocumentadas, fundamentalmente menores marroquíes, de viajar ocultos en los barcos que enlazan con la península no es algo exclusivo de esta jornada.

Según datos de la Guardia Civil, hasta ayer, en 2014, han sido halladas en el recinto portuario con tales fines 2.130 personas, de las que 210 eran menores de edad.

Esta circunstancia supone casi el 80 por ciento de la carga de trabajo de los agentes del instituto armado de la sección fiscal del muelle, porque deben tratar de evitar que los menores se cuelen en los barcos, así como velar por la seguridad de estos, ya que acceden saltando muros o tratando de llegar al barco usando las cuerdas de los amarres.

Una vez localizados, los menores son trasladados por la propia Guardia Civil al centro de la "Purísima", mientras que los mayores de edad son puestos a disposición de la Policía Nacional para que proceda a aplicar la Ley de Extranjería.

Para contar con una mayor efectividad en las tareas, los canes del Grupo Cinológico de la Guardia Civil están realizando minuciosos controles y a ellos se han sumado también 5 perros pertenecientes a la Unidad de Guías Caninos de la Policía, cuatro de ellos expertos en la localización de personas ocultas y otro detector de drogas.

Estos perros han sustituido al detector de latidos, usados en otras ocasiones, pero que actualmente se está utilizando en el paso fronterizo de Beni Enzar para detectar a inmigrantes en dobles fondos.

La Operación Feriante se cerró el pasado año con 152 interceptados, de los que casi 70 eran menores.

Mostrar comentarios