20-32. El Cuatro Rayas Valladolid se paseó en Cuenca

Cuenca, 5 oct.- El Cuatro Rayas Valladolid se paseó en Cuenca y consiguió una victoria tan inesperada, por su amplitud, como inexplicable fue la actuación del Ciudad Encantada, con un juego tan plagado de errores que terminó por evitar algo de emoción en un partido atractivo.

Mientras que los vallisoletanos fueron un equipo eficaz, acertado y regular en su juego, los conquenses mostraron una imagen que no se recuerda en Cuenca.

Como dato principal, las 17 pérdidas de balón que propiciaron 10 goles del rival. Otro dato de este partido es el hecho de que Paván, segundo máximo realizador de la liga, no marcó gol alguno. Lo dicho, un partido deslucido al no tener rival el cuadro de Juan Carlos Pastor.

La primera parte tuvo un comienzo muy distinto de su final. En sus inicios, tras el 1-3 a los seis minutos, el Ciudad Encantada reaccionó y puso el 5-3, gracias a las paradas de Kappelin y los robos de balón. El encuentro mantuvo la igualdad hasta el cuarto de hora, con 5-6 para los vallisoletanos.

A partir de ahí el conjunto conquense empezó a vivir una situación surrealista que se convirtió en una pesadilla. En los otros quince minutos sólo pudo marcar dos goles, mientras que su rival iba aumentando paulatinamente su distancia en el luminoso hasta llegar a un sonrojante 7-16 al descanso.

Para que ese marcador fuera realidad hay que destacar la gran actuación de Sierra (con trece paradas, incluyendo dos penaltis, en esta primera parte) que desquició al ataque local, incluyendo a la "conexión" cubana que se fue al descanso con tan sólo tres goles, por culpa del meta vallisoletano y por lanzamientos fuera de la portería.

A la actuación memorable de Sierra hay que unir el juego serio en ataque del Cuatro Rayas, buscando el momento oportuno del lanzamiento y aprovechando en los últimos minutos el pase al pivote Ángel Romero que, con tres goles consecutivos, terminó por sentenciar el partido.

La segunda parte sobró, aunque hubo que aguantarla para alegría del equipo de Juan Carlos Pastor y sufrimiento de la fiel afición conquense.

Zupo Equisoain hizo jugar a todo el equipo, el Ciudad Encantada intentó acortar distancias, pero se estrelló ante la defensa y el portero visitante, propiciando claros contraataques.

Y cuando se jugaba en posicional, todo se resolvía con balón al pivote Romero que no falló y ya, en la recta final del partido, aprovechar los numerosos robos de balón para lanzar el contraataque sin fallo.

- Ficha técnica:

20 - BM Ciudad Encantada (7+13): Kappelin; Fede Fernández, Sabonis (2), Mendoza, Da Costa (4), Juanjo Fernández (5,1p), Georgescu (2), siete inicial, De Hita (p), Corzo (3), Cibulskis (4), Paván y Ángel Pérez.

32 - Cuatro Rayas Valladolid (16+16): Sierra; Joli (6, 2p), Krivokapic (3), Ángel Romero (6), Gurbindo (3), Cutura (4), Nikcevic (5), siete inicial, Lamariano, Asier Antonio (3), Lacasa, Eilert (1), Ávila y Tokic (1).

Marcador cada cinco minutos: 1-2, 5-3, 5-6, 6-9, 7-12, 7-16, descanso, 9-19, 12-23, 12-25, 13-29, 17-30 y 20-32.

Árbitros: Pastor Gamón y García Fernández. Excluyeron, por parte local, a Da Costa, Juanjo y Georgescu. Por parte visitante a Krivokavic (2), Romero y Ávila (2).

Incidencias: Quinta jornada de la Liga Asobal. Polideportivo El Sargal. Lleno. 1.300 espectadores.