La purga de Erdogan llega hasta al fútbol

La Federación de Fútbol turca anunció este martes que despidió a un grupo de 94 funcionarios, incluyendo a varios árbitros, tras el golpe de estado fallido del pasado 15 de julio, que intentó derrocar al presidente Recep Tayyip Erdogan.

"Nuestra federación consideró que era necesario despedir a 94 personas, incluyendo árbitros con grado regional y nacional y asistentes réferi, miembros del comité regional de arbitraje y a observadores tanto nacionales como regionales", dijo en un comunicado la Federación de Fútbol de Turquía.

Después del intento de golpe, en Turquía hay una persecución implacable de simpatizantes, reales o imaginarios, del predicador Fethullah Gülen, exiliado en Estados Unidos pero a quien Ankara responsabiliza por el intento de derrocar al gobierno.

El comunicado de la Federación no dio más precisiones, pero el diario Hurriyet informó que uno de los afectados era un directivo activo de la Superliga, sin mencionar su identidad.

Todos los miembros de los comités afiliados a la Federación de Fútbol habían renunciado durante el fin de semana para permitir una inspección de seguridad y descartar vínculos con el movimiento de Gülen.

Terminada la investigación, se aceptaría la dimisión de quienes aparecieran vinculados a la "organización traidora terrorista y se rechazaría la de los miembros que resultaran limpios, para que continuaran en su cargos", aseveró el comunicado. El lunes, la TFF anunció que se había aceptado la dimisión, presentada el día anterior, de todos los miembros del Consejo Central de Árbitros, "vista la necesidad". 

En la noche del intento de golpe de Estado, la televisión turca mostró imágenes de un helicóptero secuestrado por los conspiradores aterrizando en el estadio del Besiktas.

El presidente de la Federación, Yildirim Demiroren, indicó que todos los partidos y los compromisos internacionales van a jugarse, tal y como estaban previstos antes del golpe.58 periodistas detenidos

La destuitución de los árbitros de fútbol coincide con el arresto, este fin de semana, de otros 17 periodistas. Así, la Federación Europea de Periodistas (EFJ, por sus siglas en inglés) y la Federación Internacional de Periodistas (IFJ) han denunciado la detención de al menos 58 periodistas y propietarios de medios de comunicación desde que tuvo lugar el fallido golpe de Estado en Turquía, el pasado 15 de julio.

Las dos organizaciones ya denunciaron la semana pasada la "criminalización" de la labor realizada por estos profesionales. Ambas organizaciones han elaborado una lista con la información de los periodistas sobre los cuales pesa una orden de detención o prisión en el país. Si bien el último balance era de 42, este lunes lo han elevado a 58.

Por otro lado, un responsable turco que habló bajo anonimato, indicó que las autoridades emitieron órdenes de detención contra 98 miembros del personal de un gran hospital militar de Ankara, incluidos médicos. De esta manera, el martes, tras un registro policial, fueron detenidos medio centenar de empleados del GATA (Gulhane Military Medical Academy), entre ellos médicos militares, anunció la agencia Anadolu citando fuentes policiales.Más de 50.000 despedidos y 8.000 arrestados

Periodistas y futbolistas no son los únicos afectados por la purga de Erdogan. Según el diario Hürriyet, la cifra de detenidos supera los 8.000 y la despedidos suma más de 50.000 personas.

Así, el total de trabajadores, públicos o privados, que han sido suspendidos de empleo a consecuencia del golpe llega a 49.337 personas. Entre ellos hay:21.000 profesores de centros educativos privados.15.200 profesores y otros funcionarios de Educación han sido suspendidos del servicio y se ha iniciado "una investigación respecto a cada una de esas personas", según el GobiernoOrden de dimisión a los 1.577 decanos de facultades turcas, tanto de las universidades públicas como de las privadas. 8.777 empleados del Ministerio del Interior, la mayoría de ellos policías y gendarmes, entre los que figuran 11 generales y 61 coroneles.1.500 funcionarios del Ministerio de Finanzas257 trabajadores de la Oficina del Primer Ministro.2.745 jueces y fiscales han sido suspendidos, entre ellos cinco miembros del Consejo Supremo de Jueces y Fiscales, el cuerpo que decide sobre los nombramientos en la Judicatura.Un gobernador provincial, 29 exgobernadores, 52 responsables de distritos, registradores de la propiedad, asesores judiciales e incluso 12 conserjes en edificios públicos han caído en la depuración.

Además, hay 8.660 "golpistas" detenidos, de los que 990 han sido enviados a prisión preventiva por orden de un juez, según cifras oficiales. Entre los detenidos figuran 6.000 militares, 100 policías, 755 jueces y fiscales, así como 650 civiles, entre ellos 58 periodistas y unos 50 médicos.Medidas excepcionales

Por otro lado, se ha establecido la prohibición de viajar al extranjero de todos los empleados públicos, a no ser que cuenten con permiso expreso de sus superiores y se ha emitido una orden de interrupción de las vacaciones y regreso a los puestos de trabajo de los funcionarios

También se ha procedido a la retirada de licencia a 24 medios de comunicación, por orden del Consejo Supremo de Radio y Televisión de Turquía (RTÜK).

Sin embargo, lo más grave es la velocidad con la que Turquía avanza hacia el restablecimiento de la pena de muerte. De esta manera, en una entrevista con el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung, el ministro de Exteriores turco argumento que el gobierno “está bajo una fuerte presión de parte del público para la reintroducción de la pena capital”. “Recibimos miles de mensajes de texto y tweets donde se dice ‘si no se restablece la pena de muerte no los votamos más”, dijo.

Para que se celebre un referéndum sobre la pena de muerte serían necesarios 330 de los 550 bancas del Parlamento. El AKP, partido en el poder, cuenta sólo con 317. Sin embargo, cuenta con el apoyo del ultranacionalista MHP, que tiene 40 bancas, lo que le da el número suficiente al gobierno de Recep Tayyip Erdogan para aplicar la medida