A Scolari le funciona el 'Neymarsistema' y Brasil ya está en los octavos de final

Neymar es más de medio Brasil. La selección anfitriona depende de la magia de su estrella para seguir avanzando rondas en el torneo. 'Ney' solito ya ha conseguido meter a su equipo en los octavos de final como líder del Grupo A y quiere más, pero a partir de ahora será más difícil.

Scolari dibuja en su pizarra el 'Neymarsistema' antes de cada partido y por ahora no le falla. Consiste en pintar los nombres que conformaban el bloque de la Copa Confederaciones y darle el balón a Neymar. El fútbol del seleccionador, no enamora a nadie, pero tampoco engaña a los aficionados brasileños. Scolari impone su fútbol poco vistoso, pero muy competitivo, algo primordial en un torneo de siete partidos.

En Brasil, Neymar no naufraga ante la hegemonía de Messi, como en el Barça. Fred no es Messi, no. Scolari le ofrece mayor libertad y ocupa una posición más centrada en ataque. Esta variante aumenta la influencia de Neymar en el juego colectivo. Se siente más importante, toma la responsabilidad y realiza jugadas díficiles de imaginar para otros futbolistas.

Tras un invierno de letargo, el verano le ha venido bien a Neymar. En su país le vimos brillar en el Santos y en su país ha vuelto a tener ganas de arrancar desde la izquierda para ver el fútbol de cara y batir líneas defensivas con golpes de cintura, pero también se mueve por el centro e incluso aparece por la derecha en alguna ocasión si la ocasión lo requiere. Asume mucha responsabilidad, sus compañeros trabajan defensivamente por él y cuando tiene ser determinante en ataqe lo hace con todas las 'luces encendidas'.

Neymar sí tiene en Brasil total confianza en su juego y esto sumado a que tiene detrás el apoyo de todo un país le convierte en un jugador imparable. A pesar de su juventud responde a la presión. Cuando los rivales se muestran mermados físicamente, aparecen los espacios y Neymar se desata con regates endiablados y la velocidad que le caracteriza.

Por si fuera poco, también está acertado de cara a la portería rival. En el Barcelona logró nueve goles en la Liga, en la primera fase del Mundial ya ha logrado cuatro tantos. Desastacó a Brasil en el debut ante Croacia con un doblete e hizo lo propio en el partido decisivo ante Camerún. No es un '9', pero a veces lo parece porque tiene recursos de sobra para acertar con la portería rival. Ya ha marcado desde fuera del área, de penalti, al primer toque y tras jugada individual. Hasta el momento es la estrella del Mundial. Espera Chile.