Álvaro Quirós, el golfista de moda en Europa

  • Madrid.- Con el eco aún audible de los Premios Laureus que recibieron la "Roja" y Rafa Nadal, los fogonazos de los flashes tuvieron que iluminar el rostro de otro deportista español, el del golfista Álvaro Quirós, campeón en Dubai y ahora perfil de moda en la elite de este deporte.

Álvaro Quirós, el golfista de moda en Europa
Álvaro Quirós, el golfista de moda en Europa

Madrid.- Con el eco aún audible de los Premios Laureus que recibieron la "Roja" y Rafa Nadal, los fogonazos de los flashes tuvieron que iluminar el rostro de otro deportista español, el del golfista Álvaro Quirós, campeón en Dubai y ahora perfil de moda en la elite de este deporte.

En la capital de los Emiratos Árabes, en cuyos desiertos brota ya menos petróleo, Quirós probablemente estropeó un sueño. Rompió el deseo del jeque por ver cómo emergía entre los rascacielos de la metrópoli la figura de Tiger Woods, cuya imagen se dañó a finales de 2009, en aquel invierno que aireó sus infidelidades y congeló su futuro.

Tiger, que rara vez participa en torneos del circuito europeo, tiene sin embargo en Dubai una cita anual ineludible. En esos Emiratos, el golfista ahora relegado al tercer puesto en la lista mundial maneja intereses comerciales y financieros, por lo que aterrizó en el Golfo Pérsico fiel a este compromiso.

Pero más allá de la fría tez de los contratos, el prurito en Dubai para Tiger era muy distinto: volver a disfrutar del sabor de la victoria tras quince meses de abstinencia, otra de las penitencias para el jugador que posee el mejor palmarés (14 'Grandes') de cuantos permanecen en activo.

El jeque vestido con su "kandora" (túnica blanca) y su "hatta" (velo), que soñaba con Tiger, tuvo que esbozar una sonrisa con el verdadero final de esta bonita historia. Quirós fue el protagonista del desenlace.

La luz rojiza del desierto iluminó a este joven andaluz de 28 años, alto y espigado como un rascacielos (1,91 metros), fuerte como los vientos de su Guadiaro natal y con la sonrisa instalada de manera sincera en su quijada.

En su torneo número cien Quirós ganó el quinto título de su carrera. Ahora lidera el ránking europeo, vuelve al top-20 mundial y su estatus ha subido como la espuma. En Dubai ganó con el mejor promedio en distancia con el 'driver' (284 metros), que es su mejor pasaporte para seguir deslumbrando en los torneos estadounidenses.

Quirós esta semana será una de las referencias en el Accenture Macth Play de Marana (EE.UU.), de la serie de los Mundiales (WGC), y para el mes de abril se le abren por tercera vez las puertas del Augusta National, un campo cuyos 'greens' han castigado hasta ahora su fogosidad.

Si el golf moderno precisa de un latido constante y atractivo de sus estrellas, Quirós ha entrado de lleno en esa órbita. El golf de elite y su mercadotecnia sonríe a Quirós, un golfista criado en el campo público de La Cañada, en Guadiaro. Allí exprimió todo su talento. Después, el'swing' y su temperamento han sido moldeados con paciencia por Pepín Rivero, un legendario de este deporte en España.

El golf español está de enhorabuena en 2011 y no sólo por el éxito de Quirós en Dubai y su segundo puesto hace una semana en Qatar.

El malagueño Pablo Martín se impuso en el primer torneo de la temporada, en Sudafrica. Otro andaluz, Manolo Quirós, acabó segundo también en el torneo posterior disputado en ese país y el grancanario Rafa Cabrera terminó en el 'top-7' en Abu Dhabi.

El veterano Miguel Ángel Jiménez, de 47 años, se sumó a la fiesta española al quedar a un paso de ganar en Bahrein, mientras los europeos ya son vigilados por el maestro José María Olazábal, designado como el próximo capitán para la Ryder Cup, en 2012.

El circuito europeo asiste al mejor arranque español de la última década, al que se sumará en breve Sergio García. Mientras tanto, Álvaro Quirós es el mascarón de proa y el hombre de moda del golf mundial.

Antonio Tomás

Mostrar comentarios