Aprobada ampliación de capital de 4,5 millones, basada en balance descuadrado

  • La Junta de Accionistas del Racing de Santander ha aprobado hoy una ampliación de capital por importe de 4,5 millones de euros, basada en un balance de situación en el que se ha detectado un "descuadre" de casi un millón de euros, que la auditora ha achacado a una "errata".

Santander, 12 jun.- La Junta de Accionistas del Racing de Santander ha aprobado hoy una ampliación de capital por importe de 4,5 millones de euros, basada en un balance de situación en el que se ha detectado un "descuadre" de casi un millón de euros, que la auditora ha achacado a una "errata".

Los accionistas minoritarios han reclamado, con mucha insistencia, que la junta se pospusiera hasta que se les facilitara un "balance real" que reflejase la "imagen fiel" de la situación en la que se encuentra el club, ya que la ampliación de capital se basa en dicho balance.

Sin embargo, el presidente del Racing, Ángel Lavín, y el secretario del consejo de administración, Carlos Ais, entendieron que no era necesario ni para aprobar el balance ni para seguir adelante con el orden del día, alegando que bastaba con "suprimir" una partida (980.703 euros) y que el balance "ya se corregirá".

Así, se ha aprobado una "operación acordeón", que conlleva una reducción de capital de 1,8 millones de euros para equilibrar el patrimonio de la sociedad, por la que se rebajará el valor de las acciones, y una ampliación de capital, por importe de tres millones de euros, a la que hay que añadir una prima de emisión de 1,5 millones.

Una vez aprobada la ampliación de capital, los accionistas minoritarios abandonaron la junta en señal de protesta contra los actuales gestores del club y de disconformidad con el modo de proceder de la mesa presidencial.

La tensión comenzó desde el momento en que aparecieron los miembros de la mesa, con un retraso de una hora. Ángel Lavín fue recibido con el ya habitual grito de "¡Fuera chorizos de El Sardinero" e instantes después hubo forcejeos y empujones cuando el presidente de la Asociación de Peñas del Racing, Bernardo Colsa, trató de acercarse a la mesa y la seguridad privada se lo impidió.

Colsa, tras comprobar los poderes concedidos a Ángel Lavín por Ahsan Ali Syed (accionista mayoritario), cuestionó la validez de los mismos al apreciar irregularidades en la cesión.

A continuación se presentó el balance (cerrado a 31 de marzo de 2013), verificado por Olszewski Auditores S.L.. Cuando la auditora, a petición de los accionistas, confirmó que ese balance reflejaba la "situación real" del club, Colsa le hizo ver que las cifras no cuadraban, al tiempo que la empresa reconocía que había "una errata".

La mesa insistió en minimizar esa "errata", alegando que bastaba con "tachar" la partida sobrante, mientras que los accionistas minoritarios subrayaron que no se puede justificar la necesidad de una ampliación de capital basada en un "balance erróneo".

Las peticiones de los minoritarios de aplazar la junta fueron desoídas y se pasó a la aprobación de la ampliación de capital, punto en el que la mayor parte de ellos se abstuvieron, mientras que votó en contra el representante de Dunviro, empresa de Jacobo Montalvo, quien mantiene litigios con Ali Syed por la propiedad del club.

Antes de seguir con el orden del día Colsa y otros accionistas pidieron que se sometiese al Consejo de Administración a una acción social de responsabilidad, para hacerles ver "el sentir del racinguismo".

Colsa exigió a Ángel Lavín que dimitiera y este le respondió afirmado que su dimisión está "puesta sobre la mesa" y que para hacerla efectiva, dijo, "solo tenéis que poner el dinero" de la ampliación de capital.

Con la ampliación de capital ya aprobada, Colsa exhortó a los asistentes a que abandonaran la junta; y, a partir de ahí, la mesa continuó con el tramite de aprobar el resto de puntos frente a las sillas vacías que se habían instalado en los bajos de El Sardinero.

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