Arturo, el sobrino de Pérez Reverte, quiere ahora escribir goles de Primera

David Jurado

Córdoba, 27 jun.- La historia de Arturo Rodríguez Pérez-Reverte, sobrino del afamado escritor cartagenero, merece una mención aparte en el ascenso blanquiverde, y es que como recogepelotas del Cartagonova sufrió hace quince años el antepenúltimo ascenso del Córdoba, y sin embargo ahora sueña con escribir como cordobesista goles de Primera.

Allá por el 30 de junio de 1999 Arturo era un niño, un hincha más de aquel Cartagonova que recibía al Córdoba en el partido final de la fase de ascenso a Segunda B, en un escenario que por colorido y condiciones presentaba una imagen semejante a la que los califales sufrieron el pasado domingo en el Gran Canaria.

Entonces Arturo tenía sólo diez años y desde la banda de aquel abarrotado estadio del Efesé, como recogepelotas de ese partido, sufrió su primera gran decepción en el mundo del fútbol, ya que el Córdoba acabó remontando el gol inicial de los departamentales para imponerse por 1-2 y ascender.

La vida continuó y aquel chaval pasó de recogepelotas a jugar con su Cartagena, pero como tantos futbolistas tuvo que acabar por marcharse de su tierra para labrarse un futuro profesional. Jugó en el Caravaca y llegó hasta el filial del Getafe hace dos temporadas, para fichar el pasado veranos por el conjunto manchego de La Roda.

Su primera vuelta en el grupo IV de Segunda B fue primorosa, para colocarse como máximo goleador de la categoría de bronce con quince goles en veinte partidos, lo que le valió fichar en el mercado invernal por el Córdoba CF.

Sólo unos 30.000 euros tuvo que pagar la entidad blanquiverde por su traspaso, para debutar en Segunda A el pasado 4 de enero marcando el primero de los dos goles de la victoria ante el Recreativo, triunfo que a la postre fue vital ya que el Córdoba se clasificó para la fase de ascenso gracias al mejor coeficiente particular con los onubenses con los que acabaron empatados el campeonato regular con 61 puntos.

Arturo marcaría un gol más en sus primeros quince partidos en la división de plata, en los que discutió la titularidad del máximo goleador del equipo, Xisco Jiménez, y ahora a sus 25 años, tras derramar aquellas lágrimas hace quince con su Cartagena, se apresta a jugar en Primera con el Córdoba.

"Somos de Primera y no me lo podía imaginar", ha reconocido a Efe Arturo, que en diciembre jugaba en Segunda B con una Roda que acabó descendiendo a Tercera tras perderle en el mercado invernal.

"He pasado de Segunda B a Primera en seis meses en los que hemos sufrido mucho, pero somos un grupo increíble", ha destacado Arturo como base principal del éxito cordobesista, conjunto con el que ahora confía en hacer realidad su sueño de niño para que su tío pueda escribirlo.