Barcelona-Real Madrid: los blancos pegan más y le pegan más

El Real Madrid comete y recibe más faltas que el Barcelona. Los datos no dejan lugar a dudas entre blancos y azulgranas (115/143 por 101/91). El "Mou Team" acumula un total de 19 tarjetas amarillas por 17 de los catalanes. Dos rojas han recibido los madridistas, mientras que ningún expulsado hay entre los de Guardiola. Este es uno de los datos que nos deja hasta el momento la competición liguera.

El equipo que ha diseñado Guardiola es considerado como el paradigma del fútbol de ataque, la perfección del estilo ofensivo que instauró Cruyff, y desarrolló la selección española con la llegada de Luis Aragonés. Su juego se basa en la posesión, y esto se refleja en el número de pases que acumula en lo que va de temporada: 6946 frente a los 4746 de los blancos.

Pese a este mayor control de los partidos, y a la clara vertiente ofensiva de los jugadores blaugranas, en el apartado rematador gana el conjunto entrenado por Mourinho. Eso sí, la diferencia es mínima: 73 remates a puerta frente a 72. Las cosas cambian cuando se valoran el acierto de estos disparos: 31 goles han anotado los merengues por 27 de su máximo rival. El Real Madrid es más eficaz: un remate más, pero cuatro goles de diferencia a su favor. En otros aspectos ofensivos, las cosas están más repartidas: el Barcelona regatea más (101 a 72), mientras que el Real Madrid acumula más asistencias (23 a 17).

El equipo blanco se caracterizó la temporada pasada por su buen despliegue defensivo, como es costumbre en los clubs que entrena Mourinho. En ésta lo mantiene, aunque al buscar con mayor asiduidad la portería rival, al estar más volcado, también está más expuesto.

El Barcelona usa otra forma de defender, la que consiste en negarle el balón a sus rivales. Por los números de unos y otros, la azulgrana da mejores resultados, o al menos Víctor Valdés vive más tranquilo que Casillas. El capitán del Madrid ha recibido 32 remates por los 18 que ha sufrido su suplente en la Selección, de los cuales 6 han terminado dentro de la portería blanca, y 4 de la azulgrana.