Blancos de Rueda afronta ocho finales con esperanza y fe en sus opciones

Valladolid, 27 mar.- El Blancos de Rueda afronta ocho finales con esperanza y fe en sus opciones que, aunque cada vez son más limitadas, aún existen, y por ello la plantilla vallisoletana apela a su capacidad de entrega y de lucha para mantenerse con vida hasta el último día.

En este sentido, el escolta argentino Diego García ha recalcado, en declaraciones a los periodistas, que el objetivo es "salir con intensidad", como la que mostraron en el último encuentro ante el Barcelona, en el que tuvieron la posibilidad de ganar pero que se les escapó en la prórroga.

"Aún estamos dolidos por esa derrota ante el Barça, ya que con un poco más de suerte pudimos haber logrado una victoria que para nosotros además era tan importante, pero si seguimos aquí es porque creemos firmemente en que tenemos opciones de salir adelante y vamos a darlo todo para conseguirlo", ha precisado García.

Por su parte, el pívot Eduardo Hernández-Sonseca ha reconocido a los medios de comunicación que el equipo se llevó "un mal rato, un disgusto y un mal sabor de boca" en el partido ante el Barça, que "tuvo la suerte del campeón", pero prefiere "quedarse con lo bueno" de ese choque, que fue "la forma en la que se jugó".

"Nos quedan cuatro partidos en casa y otros cuatro fuera y sabemos que matemáticamente no hay nada decidido aún, por lo que vamos a ir a luchar por la salvación ya que ha habido muchos precedentes de equipos que estaban igual o peor que nosotros y al final lograron mantener la categoría", ha recordado.

Hernández-Sonseca tiene claro que el equipo necesita, además de ganar los partidos de casa, conseguir resultados positivos en otros feudos, empezando por el del Joventut, al que confían en sorprender este domingo, haciendo un buen partido y controlando la presión.

También el pívot estadounidense Curtis Borchardt ha confiado en que el equipo sea capaz de "jugar fuera de casa" como lo hicieron ante el Barcelona y no volver a dar la imagen que se ofreció en Murcia, donde un rival directo en la lucha por la permanencia les arrolló sin contemplaciones.

"Es difícil explicar por qué el Blancos de Rueda que jugó ante el Barcelona es el mismo que el que lo hizo ante Murcia, pero hay días en los que no sale nada y al rival, en cambio, todo, como pasó allí", ha comentado Borchardt, para quien su equipo ha demostrado "que puede ganar a cualquier rival si juega con intensidad".