Brasil no quiere tropezar dos veces en la misma piedra

Londres, 3 ago.- La selección brasileña se mide mañana ante la de China, en la cuarta jornada del torneo olímpico de baloncesto, con la intención de no tropezar dos veces en la misma piedra y que una falta de concentración les pueda jugar una mala pasada.

Brasil quiere tener un partido lo más cómodo posible y que una victoria holgada les permita ir preparando el partido ante España que cerrará la fase de grupos antes de los cruces de cuartos de final.

La derrota ante Rusia no parece haber pasado factura a la selección brasileña. Al contrario, la derrota por un punto, en el último segundo y tras un triple afortunado de los rusos puede servir de revulsivo.

"Sí hemos aprendido la lección, puede ser positivo haber perdido", dijo el entrenador Ruben Magnano. "Estamos en un torneo olímpico y nos enfrentamos con las mejores selecciones del mundo. Si sabemos llevar esto al terreno positivo puede ayudarnos en los partidos difíciles que nos quedan", añadió.

Lo cierto es que en la primera cita exigente, Brasil respondió como los mejores y de hecho dominó durante muchos minutos a Rusia, un equipo contrastado internacionalmente y "que está entre las potencias del baloncesto", en palabras de Magnano.

La ausencia olímpica brasileña, durante dieciséis años, tiene ciertos peajes y uno de ellos bien pudo haber sido la derrota ante Rusia.

Ahora, ante China, Brasil, además de recuperar la senda de la victoria, intentará pensar en la selección española, con la que se enfrentará el próximo lunes en la última jornada de la fase de grupos.

China, pese a perder hasta ahora todos sus compromisos, es un equipo que puede poner en problemas a cualquiera si su rival no se lo toma en serio. Y Brasil, además, tiene la experiencia propia del partido ante los anfitriones, en donde una mala salida y falta de concentración a punto estuvo de costarles caro.