Vitoria, 22 mar.- El Caja Laboral afronta los dos últimos partidos del Top 16 de Euroliga obligado a ganar y sin que el pase a cuartos de final esté en sus manos, ya que depende de los resultados de los rivales.
La derrota de ayer en la pista del Barcelona Regal deja contra las cuerdas a los de Zan Tabak, con seis triunfos y seis derrotas, que tienen ya la necesidad de sumar sendos triunfos en la visita al Khimki Moscú la semana próxima y en el Buesa ante Montepaschi en la jornada de clausura del Top 16.
Además, en la cancha de Khimki deberán remontar los doce puntos de desventaja, 71-83, por la que los rusos vencieron en el Buesa Arena.
El futuro del Caja Laboral está también en manos de los otros cuatro equipos que pelean con los baskonistas por las tres plazas libres que quedan en el grupo.
Los que más ventaja tienen son Montepaschi y Olympiacos, que aventajan en un partido a los vitorianos, a expensas de los encuentros que deben jugar hoy ante Besiktas y Maccabi Tel Aviv, respectivamente.
Khimki recibe a un Fenerbahce ya desahuciado y sin ningún objetivo en la competición, tras la floja imagen que dejó en el Buesa Arena hace una semana, por lo que se aventura complicado que pueda superar a un equipo ruso muy fuerte en su cancha.
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