Barcelona, 15 ene.- El portero del Espanyol Kiko Casilla, quien afrontó su primer encuentro oficial de Liga después de la lesión del titular habitual, Cristian Álvarez, ha confesado que en su partido ante el Sevilla "ya se vio a otro meta".
El jugador tarraconense era hasta ahora el habitual en Copa del Rey y ha tenido que esperar durante tres temporadas, cedido a equipos de Segunda división, para disfrutar de la oportunidad en el primer equipo.
"Ha llovido mucho desde la última vez que jugué en Liga, han pasado tres años", ha recordado el guardameta.
Casilla ha destacado, además, el detalle de Cristian Álvarez con el grupo al viajar con muletas, solo, hasta Sevilla: "Tengo que darle las gracias en nombre de todo el equipo, venir solo y con muletas es digno de un gran capitán como es. Durante toda la semana me ha estado animando y me ha dicho que lo haría muy bien".
El equipo firmó un empate en el Sánchez Pizjuán (0-0) y ahora ya piensa en los cuartos de final de Copa ante el Mirandés, el próximo martes en Cornellá-El Prat.
Mañana la plantilla volverá al trabajo en la Ciudad Deportiva a las 10.30 horas a puerta cerrada, ya que el entrenador Mauricio Pochettino quiere ultimar detalles tácticos.
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