Casillas cumple con oficio, Silva lidera el juego y Alcácer hace de Villa

    • El capitán de la selección recuperó la titularidad, estuvo muy atento y tuvo dos buenas intervenciones en cada uno de los tiempos que evitaron más goles.
    • El canario estuvo omnipresente en el juego de ataque, dando velocidad, ritmo y profundidad a la pelota y el delantero valenciano se asoció perfectamente e hizo daño con sus desmarques.
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Ulises Sánchez Flor

Vicente del Bosque se jugaba mucho en el primer partido oficial tras el Mundial. El amistoso ante Francia en París tampoco despejó las dudas de una selección que se había atascado en el juego de ataque, que no hacía goles y que había perdido el sello del buen juego. En su primer once post-mundialista había diferentes apuestas. Una la de mantener a Casillas en la portería, otra la de comprobar quién asumiría el papel de futbolistas de peso como Xavi, Xabi y el ausente Iniesta, por lesión, y la última la de meter a Alcácer como '9'. No le falló ninguna. Todo salió bien.

Iker Casillas no tuvo mucho trabajo y el poco peligro que le llegó lo resolvió con seguridad. En el anterior partido, en París, había ocupado De Gea la portería y ahora se esperaba la respuesta del capitán. En el minuto cuatro, con cero a cero, salvó un tanto de los macedonios en un lanzamiento de falta. En una estirada sacó la mano a una pelota que se colaba por la escuadra. En el inicio de la segunda parte, con 3-1, evitó otro tanto con el pie. Estuvo acertado, atento y seguro.

El cerebro de la selección fue David Silva. Hizo de todo. De Iniesta y, por momentos, recordó al gran Xavi. El canario estuvo omnipresente de centro del campo hacia delante. Le dio velocidad a la pelota, pausa, cambio de orientación, filtró pases a Alcácer y Pedro, asistió, puso el ritmo que le interesaba, le hicieron un penalti y marcó un gol. También se vació en la presión para robar la pelota. Un gran Silva que demuestra quela fórmula de los bajitos no está acabada porque el talento, la calidad, la imaginación y la clase no se ha extinguido en la selección.

El debutante Paco Alcácer se estrenó con un gol. Demostró ser un '9' con maneras de Villa. Un jugador que se mete entre los centrales y que juega al borde de la línea de fuera de juego. Se ofreció, tiró desmarques, cayó a las bandas y no estuvo quieto. Es un chico con olfato de gol, instinto y muy activo. Enseguida se acopló al juego de asociación de los bajitos y le dio más profundidad a los pases de Silva, Cesc y Alba. Demostró personalidad y todo lo que hizo tenía sentido y llevaba peligro. Sin Diego Costa se lució el valenciano y el juego de ataque de la selección.

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