Cicloturistas rememorarán la etapa Barcelona-Andorra del Tour de 2009

  • Las carreteras que unen Barcelona y Andorra vivirán el próximo 14 de septiembre la marcha cicloturista que rememora la séptima etapa del Tour de Francia de 2009, que recorrió los 232 kilómetros que separan la capital catalana y el puerto de montaña de Arcalís (Andorra).

Barcelona, 23 may.- Las carreteras que unen Barcelona y Andorra vivirán el próximo 14 de septiembre la marcha cicloturista que rememora la séptima etapa del Tour de Francia de 2009, que recorrió los 232 kilómetros que separan la capital catalana y el puerto de montaña de Arcalís (Andorra).

La "Etape Barcelona-Andorra by Le Tour de France", cuya segunda edición ha sido presentada hoy en Barcelona, pretende consolidarse, según sus organizadores, en una fecha fija dentro del circuito para ciclistas aficionados.

"Nuestra intención es crear una carrera clásica para los cicloturistas. Queremos que sea un referente para los aficionados y, de momento, no aspiramos a ser una prueba profesional", ha explicado Joan Porcar, consejero delegado de RPM, empresa organizadora de la carrera.

Los participantes deberán sortear una jornada dura, de 232 kilómetros, que contará con la ascensión a un puerto de primera categoría, el Coll de Serra-Seca, y a otro de categoría especial, el de Arcalís, donde finalizará la carrera.

La principal novedad de esta edición será el cambio de emplazamiento de la salida que, a diferencia del año pasado, se situará en las instalaciones de la Universidad de Barcelona (UB), en la avenida Diagonal, con el objetivo de ofrecer un primer tramo de etapa más llano para los ciclistas, que, de esta manera, evitarán subir por la carretera de la Arrabassada.

Una vez lleguen a la ciudad de Molins de Rei, los participantes enfilarán dirección Manresa para ascender los dos primeros puertos, previos al coloso Coll de Serra-Seca, con el que se da inicio el tramo pirenaico de la carrera.

Tras pasar por La Seu d'Urgell, las bicicletas pisaran suelo andorrano, por donde transcurrirán los últimos 40 kilómetros de la prueba, que culminará en lo más alto del puerto de Arcalís, a 2.240 metros de altura.

Los organizadores esperan llegar hasta los 1.000 participantes y superar así los 600 que se apuntaron en la pasada edición, que se llevó el hondureño Milton Ramos con un tiempo de ocho horas y cuarenta minutos.

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