Cristiano Ronaldo choca contra la medicina deportiva

    • "Llega un momento en el que hay que replantearse la estrategia y optar por un tratamiento de reposo", explica el Doctor Alfonso del Corral.
    • El portugués, que ha jugado en 45 partidos este curso y ha disputado casi 4.000 minutos, no estará en Anoeta.
    • En las tres últimas temporadas ha superado los 60 encuentros cada una.
    • Todavía le queda la final de Copa, el tramo final de Liga, las semifinales de Champions y el Mundial.
Cristiano Ronaldo se quedó en el césped del Bernabéu
Cristiano Ronaldo se quedó en el césped del Bernabéu
Iñaki Angulo

También cuando se refiere a nuevos postulados médicos y científicos, Cristiano Ronaldo y Leo Messi son unos atletas revolucionarios. A su alrededor se ha enaltecido la teoría de que la forma de recuperar de estos futbolistas es jugar hasta la extenuación. "Llega un momento en el que hay que parar", contradice Alfonso del Corral, durante años Doctor del Real Madrid y actualmente director de la Unidad de Medicina Deportiva en el Hospital Ruber Internacional.Resuelto a jugar el sábado en Anoeta, donde el Madrid intentará seguir encaramado a la pelea por la Liga BBVA, a Cristiano Ronaldo no lo para Ancelotti. Al menos no en primera instancia. Al 'caballo' portugués lo detiene la ciencia. "Llega un momento en el que tienes que replantear la estrategia", explica Del Corral. "No te queda otra que optar por un proceso de reposo o adoptar un tratamiento conservador", apunta.Aunque pueda parecer un pretexto difundido para amparar el totalitarismo que han alcanzado estos futbolistas, el doctor no desacredita categóricamente la vocación de no parar como tratamiento recuperador. "No siempre es verdad que se recupere jugando, pero en algunos casos funciona. Se somete al jugador a un tratamiento muy meticuloso, se analizan todos los parámetros y se consigue que se recupere sin la necesidad de parar".En el discurso de Del Corral confluyen dos personalidades proclives a la fricción. La mentalidad del deportista profesional que fue y la del doctor. "Es comprensible que estos jugadores tan grandes quieran jugar siempre. El Madrid tiene un partido importante y Cristiano Ronaldo busca ayudar a su equipo". Seguramente contra su voluntad irreductible y batalladora, el portugués no estará en Anoeta. Ha sucumbido a la ciencia.Tres días de recuperaciónLa próxima vez que Ronaldo se enfunde la camiseta del Madrid sobrepasará los 4.000 minutos este curso, divididos en 45 partidos. Salvo en su primera temporada en el equipo blanco, en la que sufrió una lesión en el tobillo que le mantuvo dos meses fuera, siempre ha disputado más de 60 partidos por curso. "Llevamos treinta años con este debate y el fútbol está montado así. Lo ideal podría ser otra cosa pero no es la realidad".Con la dinámica de dos partidos semanales, la recuperación es un asunto crucial. Genera a veces sarpullido en la masa social, trabajadora en muchos casos, cuando se aduce a la dificultad de los jugadores para afrontar esfuerzos en poco tiempo. "Tres días son imprescindibles para la recuperación", zanja Del Corral, que también apunta que cada jornada extra a partir de este mínimo genera una mejora exponencial.Además de máquinas de competir, para sus clubes o selecciones, los futbolistas de alto nivel son reclamos sociales y publicitarios. Los eventos que tienen que afrontar y los compromisos de su marca personal son contraproducentes para su desempeño primario: jugar al fútbol.En este ecosistema, entre deportistas cosificados, batallan los profesionales de la medicina en el fútbol. "Lo único que podemos hacer los médicos es aplicar los mejores tratamientos y avances de última generación para ayudar al deportista de élite", asume. "Con el protocolo de recuperación hepática y muscular que venimos aplicando la recuperación después de tres días se garantiza al 100%".La NBA, comparación odiosa para el futbolistaPara el mundo del fútbol, los descansos y los programas de reposo, la NBA representa una comparación incómoda. En la competición americana de baloncesto se juegan 82 partidos en apenas seis meses, más los playoff. "Son deportes diferentes, creo que con menos desgaste físico", matiza Jorge Sierra, editor jefe de HoopsHype.com."Son gente con una preparación física muy grande", explica Sierra, para quien el baloncesto es una disciplina que se presta mucho mejor a la saturación de los calendarios. "Ahí está el ejemplo de los torneos de selecciones, donde se compite casi cada día. Las propias competiciones europeas de clubes van hacia el modelo estadounidense y ahora se juegan muchos más partidos".Uno de los interrogantes que siempre planea sobre la NBA y el deporte profesional americano es el de la laxitud a la hora de someter a controles antidoping a sus atletas. "No puedo asegurar nada a ciencia cierta", dice con cautela Sierra "pero está claro que no está muy persseguido". "Digamos que si alguien quisiera beneficiarse de esto, lo tendría fácil para salirse con la suya", resume.Las penitencias para los tramposos poco tienen que ver con el fútbol u otros deportes. "Son muy débiles", apunta Sierra, y pone el ejemplo de O.J. Mayo, excompañero de Marc Gasol en los Grizzlies, que dio positivo por esteroides y sólo recibió diez partidos de sanción."Los plazos son los plazos"Son varios los países que viven pendientes de la recuperación de sus futbolistas de cara al Mundial. La temida rotura de ligamento cruzado anterior se convierte en situación de estado en los años mundialistas.

En esa lucha contra el calendario está Sami Khedira y especialmente Radamel Falcao, que sufrió la brutal lesión con menos de cinco meses para la cita de Brasil. "Los plazos son los plazos", recuerda Del Corral.

A nivel estimativo, se considera que son necesarios entre seis y nueve meses para regresar a la competición. "Por mucho que queramos acortar, una fractura tiene unos periodos de consolidación y unos tiempos que hay que respetar". Las consecuencias de desafiar a la ciencia pueden ser letales. "Se corre un gran riesgo de que los ligamentos reconstruidos se vuelvan a romper", avisa Del Corral.

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