Madrid.- El español David Ferrer, que salvó un punto de partido ante el chipriota Marcos Baghdatis para alcanzar los octavos de final del Masters 1000 de Madrid, reconoció que fue un duelo en el que cualquiera podía haber ganado.
"No ha sido tan fácil el primer set para él como parecía. Pero Baghdatis ha estado más suelto. Después él, en el segundo, estaba más parado y lo he aprovechado. Y el tercero ha sido una ruleta. Cualquiera podía ganarlo", resumió el tenista alicantino.
"Hacía tiempo que no hacía un partido a tres sets. Estoy feliz de haber ganado el partido. He superado un punto de partido y feliz por la lucha y la entrega", dijo Ferrer, que reconoció que fue una pelea física y mental.
"Ha sido un partido físico y mental por momentos. Nos hemos ido y hemos vuelto y he tenido suerte de con 5-5 ha fallado", apuntó el tenista español, que se enfrentará al croata Marin Cilic en octavos de final.
"Cilic ha ganado fácil. Es un gran jugador y ha tenido una victoria sencilla contra el argentino Eduardo Schwank, por lo que estará bastante descansado", aventuró Ferrer.
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