Delgado y Valentín ahora honran a equipo boricua como instructores de jóvenes

Jorge J. Muñiz Ortiz

San Juan, 8 mar.- Los expeloteros puertorriqueños Carlos Delgado y Tony Valentín, figuras en las dos primeras ediciones del Clásico Mundial de Béisbol jugadas en el 2006 y el 2009, serán instructores del equipo caribeño en la próxima edición.

Delgado, máximo jonronero puertorriqueño en las Grandes Ligas, es el 'coach' de bateo, y Valentín, el de la primera base, del equipo boricua en el evento mundialista que por tercera ocasión tendrá una de sus rondas en el estadio Hiram Bithorn, de San Juan.

En dicho parque, ambos extoleteros tuvieron destacadas presentaciones en la Liga invernal puertorriqueña, Serie del Caribe y partidos de las Grandes Ligas.

Delgado, quien jugó en Grandes Ligas por 17 años, describió la experiencia como instructor de bateo como "muy buena" y "excelente".

"Estoy muy contento para aceptar este reto después de haber jugado aquí y representar a Puerto Rico. Vamos a tener un buen equipo, a hacer cosas buenas y será interesante", enfatizó Delgado.

Agregó que no se considera "maestro de nadie", sino que ve su trabajo de entrenador como "un apoyo más" a los peloteros que representarán a Puerto Rico en el Clásico Mundial de Béisbol.

La selección puertorriqueña juega ante la de España, República Dominicana y Venezuela. El grupo termina de jugar el próximo domingo y los dos equipos con las mejores marcas, pasarán a la segunda ronda del torneo, que se jugará del 12 al 16 de marzo en Miami.

"Tenemos peloteros muy talentosos, ellos saben lo que tienen que hacer", destacó el miembro del llamado "Equipo de ensueño" puertorriqueño de la Serie del Caribe del 1995.

Delgado jugó en la primera edición del Clásico del 2006, mientras que Valentín lo hizo en las primeras dos ediciones, 2006 y 2009.

Algunos de los jugadores jóvenes que tanto Delgado y Valentín destacaron, fueron los lanzadores Hiram Burgos y José Orlando Berríos, de 18 años y quien se espera que sea una de las grandes promesas en las Grandes Ligas.

Valentín describió su experiencia en el cuerpo técnico como "diferente", pues ahora, en vez de recibir consejos de sus entrenadores, él los da. "El juego es el mismo y solo es tener el mismo deseo de cuando tenía de pelotero y ayudar al muchacho para que se mantenga en el juego", expresó.

Dijo que suele recomendar a los jugadores jóvenes concentrarse en el partido y olvidarse del bullicio y la algarabía en el estadio.

Valentín admitió que siente nostalgia por no ponerse el uniforme de Puerto Rico que con tanto orgullo lució, ensució y representó.

Añadió que al jugar en casa la presión es mayor, pues sus compatriotas acuden al estadio para ver lo mejor de sus jugadores.

"Estás en tu casa jugando y tratas de dar más y no quieres hacer las cosas malas frente a su gente", puntualizó.