Deporte noruego se suma al duelo por las víctimas de doble atentado en Oslo

Oslo, 23 jul.- El deporte noruego se sumó hoy al duelo por las 92 víctimas del atentado con bomba en Oslo y el posterior tiroteo en un campamento juvenil próximo a la capital noruega y suspendió diversas competiciones previstas para este fin de semana.

La Federación Noruega de Fútbol anunció en su portal en internet la suspensión de todos los partidos de la Tippeligaen, la máxima categoría de la Liga, en señal de respeto por las víctimas de la masacre.

La semana que viene se decidirá sobre la conveniencia o no de disputar los encuentros y las posibles nuevas fechas, agregó la federación.

También los organizadores del Festival Blink de esquí nórdico sobre ruedas, que debía disputarse hoy en el centro de la ciudad noruega de Sandnes, decidieron anular la competición, sobre todo por las pruebas de tiro en el biatlón, que calificaron de inapropiadas en este momento.

"En vista de la tragedia nos hemos decidido a dar este paso", declaró el director de la organización, Odd Langhelle.

Por su parte, el noruego Aksel Lund Svindal, medallista mundial y olímpico en la categoría de esquí alpino, expresó desde Suecia, donde se encuentra de vacaciones, su solidaridad con las víctimas a través de su cuenta de Twitter.

"500 niños corren por sus vidas e intentan esconderse en una pequeña isla de un asesino. Eso está tan mal. Dadles fuerza y apoyo", escribió el deportista, y llamó a donar sangre del grupo 0 en el hospital universitario de Ullevål, en la capital noruega.

Al menos 92 personas perdieron la vida en el doble atentado perpetrado ayer en Oslo y en la vecina isla de Utøya, de las cuales 85 corresponden al ataque registrado en un campamento juvenil socialdemócrata.

Un portavoz de la policía noruega reconoció hoy en rueda de prensa que aún hay cadáveres en los edificios gubernamentales de Oslo atacados el viernes con un coche bomba y que estos "cuerpos" aún no han podido ser recuperados por el riesgo de que haya más "explosivos sin detonar" en el interior.

"La cifra final de fallecidos puede incrementarse", agregó el portavoz policial, y añadió poco después que al menos cuatro personas permanecen desaparecidas en Utøya, donde un hombre abrió fuego en un campamento juvenil y abatió a 85 personas.

Además, explicó que la policía está aún interrogando al sospechoso, el noruego de 32 años Anders Behring Breivik, al que relacionan con los dos ataques, y que los forenses están investigando las heridas para establecer cuántas armas se emplearon en la masacre.