No fue fácil para el Barça. Quizás porque la manita del Real Madrid en Pamplona les bajó la moral. Quizás porque pensaban que el rival venía entregado de antemano reservando a varios titulares. Quizás porque no tenían el día. Pero los de Guardiola tardaron 40 minutos en poner la balanza a su favor y el Athletic peleó de lo lindo.
Bielsa planteó un partido en el que presionaron al rival todo lo arriba que se puede presionar al Barcelona y eso dificultó la circulación de balón azulgrana. Además, Javi Martínez fue un perro de presa que persiguió a Messi y a los 'Pep Boys' comenzaron a faltarle ideas. Sobre todo, porque cuando Xavi no juega, el Barça se resiente.
Corrió el Athletic lo necesario para presionar. Corrió el Athletic lo necesario para morder. Corrió el Athletic... hasta que recibió el 1-0 y bajó el pistón. Porque aunque en la segunda parte hizo cambios y entraron jugadores importantes que habían tenido descanso al principio, caso de Llorente o Muniain, a los leones les faltó fuelle.
Además, el Barcelona tiene la impresionante virtud de robar el balón muy rápido y muy arriba en terreno de juego rival, lo que dificultó a los vascos mantener la posesión del balón. Eso sí, Bielsa no renunció a su estilo incluso en el Camp Nou y ante el que dicen que es el mejor equipo del mundo. La final de Copa, cuando los dos equipos estén al 100 por 100, será un espectáculo.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios