El autor del botellazo a Armando le pide perdón y dice que no quiso herirle

Sevilla, 24 sep.- El hincha del Real Betis juzgado por lanzar una botella contra Armando Ribeiro, portero de Athletic de Bilbao, ha dicho hoy al juez que no apuntó y que no tuvo intención de lesionarle, y tras el juicio le ha pedido perdón, que el deportista ha aceptado.

El juzgado penal 1 de Sevilla ha dejado hoy visto para sentencia el juicio contra el acusado Carmelo P.R., de 42 años, para quien el fiscal ha pedido dos años de prisión por un delito de lesiones y una multa de 3.600 euros por desórdenes públicos, pena que el club deportivo, personado como acusación particular, ha situado en tres años de prisión por las lesiones y cuatro meses por desórdenes públicos.

El abogado defensor, Álvaro Pimentel, ha admitido una condena de un año de prisión por el delito de lesiones, y una posible multa de 450 euros por el delito de desórdenes públicos, cuya existencia, sin embargo ha negado, a la vez que ha solicitado las atenuantes de dilaciones indebidas y reparación parcial del daño.

El letrado ha negado el delito de desórdenes en base a la declaración de un guardia civil que fue el primero que retuvo al acusado y que no apreció alteración del orden público.

El juicio se ha celebrado cuatro años y medio después de los hechos, que ocurrieron el 15 de marzo de 2008, cuando el portero del equipo visitante recibió en la cara el impacto de una botella de agua de medio litro llena lanzada desde la grada por el hincha, que a continuación fue retenido por los propios espectadores.

Pimentel ha informado a Efe de que, al término de la vista, Carmelo P.R. se ha acercado a Armado para pedirle disculpas, que éste ha aceptado.

Por su parte, el deportista, que hoy viajó desde Bilbao a Sevilla para declarar como testigo, ha relatado a Efe que recuerda "el dolor tremendo" que sufrió tras el impacto y lo desagradable de los meses de recuperación, así como la angustia de sus hijos y el daño añadido por las semanas que estuvo alejado de la competición.

Ha afirmado que ahora trabaja con los juveniles de su equipo y trata de inculcarles la repulsa a la violencia, los valores deportivos y el respeto hacia uno mismo y los contrarios.