El Calderón indulta a Quique y el club le ratifica

Madrid.- La afición del Calderón señaló a sus culpables del fiasco rojiblanco en el inicio del 2011, en el que el Atlético ha tirado por la borda todos sus objetivos y ha quedado en tierra de nadie.

La derrota ante el Valencia, cuarta consecutiva en Liga y sexta si se cuentan las dos ante el Real Madrid en la Copa, provocó otro polvorín en el Calderón, que volvió a increpar a la directiva rojiblanca y exculpó a su entrenador, Sánchez Flores.

La hinchada no olvida los dos títulos que el técnico consiguió para el club el año 2010 y ha decidido eximirle de toda responsabilidad en la horrorosa situación deportiva por la que atraviesa el equipo.

Cuando Joaquín anotó el segundo tanto del Valencia, a cinco minutos del final, el Calderón, que había apoyado hasta ese momento a lo suyos, estalló contra él consejero delegado del club, Miguel Angel Gil Marín, y fue un clamor a favor de Quique Sánchez Flores.

Por eso, tras el partido, la dirección ratificó al entrenador, según reconoció éste. Gil Marín y Cerezo dijeron a Sánchez Flores que siga trabajando y que continuará como técnico. Los dos han hecho caso al grito unánime de la grada.

Sin embargo, difícil papeleta tiene ahora la directiva. Si el equipo no experimenta un cambio radical, los gritos contra el palco se recrudecerán y los rectores pueden verse entre la espada y la pared.

La afición ha dictado sentencia. Perdona al entrenador todos sus errores porque pesan mucho más en la balanza los dos títulos del año pasado. Dos momentos que hicieron felices a muchos rojiblancos. Por eso Quique goza de su confianza.

Si el equipo no mejora y la coyuntura se agrava, los dueños del club pueden verse obligados a destituir a Quique en contra de la voluntad de la hinchada. O eso, o tendrán que aguantar más insultos cada domingo.

Lo cierto es que la situación es ya alarmante. Si bien contra el Valencia el Atlético no jugó mal y no mereció perder, el hecho objetivo es que las derrotas se acumulan en el pobre palmarés del nuevo año y han provocado una herida de consideración que puede todavía ir a peor si no se toman medidas a tiempo.

La afición quiere que siga Quique. La directiva, posiblemente ya no, pero se ha visto obligada a ratificarlo. Quique podrá trabajar esta semana para preparar el partido contra el Zaragoza. ¿Aguantará otra derrota en La Romareda?.

El horizonte se presenta complicado para el Atlético en todos sus estamentos. Quique se confesó en la sala de prensa después del partido repleto de moral para seguir adelante y seguro de que podrá hacerlo. Habrá que esperar que así sea por el bien de un equipo que alcanzó el cielo en 2010 y ha tocado fondo en 2011.