El Elche puso final a una temporada brillante con una noche para olvidar

Elche (Alicante).- El Elche puso fin a una campaña brillante con una noche para olvidar en la que se quedó fuera del ascenso al no pasar del empate a uno con el Granada en un encuentro marcado por la tensión, los enfrentamientos, las declaraciones cruzadas y en el que tan sólo le faltó un gol para subir.

La última eliminatoria por el ascenso se caracterizó por la extrema igualdad entre Elche y Granada, que empataron sin goles en Los Cármenes y a un tanto en Elche, y por los incidentes registrados en ambos encuentros.

En el partido de Elche, según señalaron integrantes de ambos equipos, hubo fricciones al acabar el partido en la zona de vestuarios y se produjeron declaraciones como la del técnico local, José Bordalás, que llamó "indigno" para la profesión de entrenador al técnico del Granada, Fabriciano González.

Quique Pina, presidente del Granada, afirmó que Bordalás había instado tras el partido a sus jugadores a acceder al vestuario del equipo granadino y el máximo accionista del Elche, Juan Carlos Ramírez reconoció que tuvo un cruce de palabras con Fabri.

"Hemos tenido infinidad de provocaciones por parte del Granada, pero no vamos a descubrir ahora quién está detrás de este club y quién es Fabri, y no voy a hablar de ciertas reuniones que hubo en los últimos días o de llamadas telefónicas", afirmó.

Ramírez recordó que cuando Fabri llegó al estadio les dijo que les iban a machacar y admitió que le respondió que era "un hijo de puta" por sus provocaciones.

Un gesto de Fabri en el gol del Granada, que Bordalás calificó de corte de mangas y el recuerdo del técnico del conjunto andaluz de que había sido despedido del banquillo del Elche hace muchos años, cuando era segundo en la Liga, completó la lista de acusaciones tras el encuentro.

A todo ello se unieron algunas circunstancias que afectaron al público con la entrada de aficionados visitantes al estadio con el encuentro iniciado, la invasión del campo por parte del público tras el encuentro, el lanzamiento de piedras dentro del campo y el cruce de insultos entre aficionados.

La diferencia con el encuentro de ida, en el que el autobús del Elche resultó apedreado, fue que la mayor parte de los incidentes se produjeron dentro del estadio y entonces tuvieron lugar en el exterior.

Para el Elche, la clave de quedar fuera del ascenso estuvo en la decisión del árbitro de anular un gol legal a Sergio Pelegrín antes del descanso y con el marcador con ventaja para el Granada por 0-1.

"El gol es legal y el auxiliar en el descanso nos pidió perdón por el error. El árbitro no tuvo personalidad para manejar el partido como debía", dijo Ramírez.

José Sepulcre, presidente del Elche, reconoció que para el Elche había sido muy duro ver como el Granada celebraba el ascenso en el estadio Martínez Valero y dijo que no olvidaba el gol legal de Pelegrín "y un penalti a Jordi Xumetra que no se pitó", además de lamentar los altercados que se produjeron al final del partido.

Ahora la plantilla del Elche iniciará las vacaciones y el club empezará a preparar el proyecto de la temporada 2011-2012 tras haber quedado a un paso del ascenso en esta campaña.

Sepulcre recordó que no habían tenido la suerte de otras veces y que iba a seguir con el trabajo en pos del ascenso a Primera División.

El Elche se ha quedado fuera del ascenso en una campaña en la que se ha iniciado un nuevo sistema de promoción, en el que el equipo ha quedado fuera del ascenso por el valor doble de los goles en campo contrario y en la que habría subido con el sistema de tres ascensos directos establecido hasta el año pasado.