El fantasma del 'Maracanazo' se pasea por Fortaleza

Jorge Figueroa

Fortaleza (Brasil), 14 jun.- El fantasma del 'Maracanazo', como se conoce la victoria contra todo pronóstico de Uruguay por 2-1 sobre Brasil en la final de la Copa del Mundo de 1950, se paseó hoy por las afueras del estadio Castelao, de Fortaleza, poco antes del debut de los celestes en el Mundial.

Personificado por 'el Pipa', un residente de Montevideo disfrazado de pies a cabeza de color azul, el fantasma pretendió impresionar e intercambió bromas con simpatizantes de la selección de Costa Rica, primer rival de Uruguay en la Copa del Mundo.

"Vamos a por otros Maracanazo y el recorrido empieza hoy", dijo 'el Pipa' a Efe, que mantiene en secreto su identidad.

La mayoría de aficionados, que en 1950 ni siquiera nacido, observaba con descrédito el agitar de brazos y los raros sonidos emitidos por el fantasma uruguayo.

Sin embargo, a Joao Aparicio un brasileño que por sus canas y poco cabello seguramente está próximo a las siete décadas de edad, se le borró de un plumazo la sonrisa del rostro al escuchar el grito del 'Maracanazo'.

Es que a 64 años de aquella final en la que Uruguay, con Obdulio Jacinto Varela como capitán superó por 2-1 a Brasil en el estadio Maracaná, de Río de Janeiro, colmado por 200.000 personas, algunas generaciones aún la recuerda.

"Aquello fue tremendo, la tristeza mas grande del pueblo brasileño, pero ahora vamos por un nuevo título mundial en casa", afirmó a modo de consolación Aparicio a Efe.

Mientras otros dos aficionados, uno uruguayo y otro costarricense, con banderas y sombreros alusivos a ambas selecciones compartían alegría y marchaban juntos hacia las tribunas en una jornada de agobiante color en Fortaleza.

"Estamos en la mayor fiesta del fútbol. Venimos con un grupo de amigos a disfrutar y ver todo lo espectacular que supone el Mundial", dijo a Efe Roberto, oriundo de Montevideo, y que ronda los 60 años.

Otro grupo numeros de costarricenses con una gran bandera de su país celebran la "presencia" de la selección de su país en Brasil.

"Para Costa Rica el solo hecho de estar aquí, en el Mundial, es motivo de orgullo por eso estamos felices y festejamos", añadió.

Cientos de aficionados de Uruguay, al grito de "soy celeste, soy celeste, celeste soy yo", recorren los alrededores del estadio y se aprestan a alentar a su selección en el debut mundialista.