Para hacerse con el control de la entidad, el jeque deberá desembolsar una cantidad que ronda los 36 millones de euros, en la que está incluida la deuda del Málaga CF, que se aproxima a los catorce millones.
En este acto, junto al jeque, estuvo su secretario, Abdullah Mohamed Haj-Ghubn, quien fue el que tomó la palabra en nombre del nuevo propietario del club, y Fernando Sanz, quien seguirá como presidente hasta finales de este mes y que en el futuro continuará ligado al Málaga en diversas funciones.
El secretario de Abdullah Bin Nasser Al-Thani dio las gracias a Fernando Sanz "por la flexibilidad en el proceso de negociación" y desveló que las conversaciones han durado "entre cuatro y cinco meses".
"Estamos orgullosos y satisfechos de formar parte de este club por su ubicación, en Málaga, Andalucía y España", apuntó el secretario del jeque, quien agradeció la posición en esta operación del Consejo Superior de Deportes y también de instituciones públicas como la Junta de Andalucía, Diputación Provincial y Ayuntamiento de Málaga, propietarias del estadio de La Rosaleda.
También subrayó que actualmente se planifica la próxima temporada y que el primer objetivo es consolidar al club en Primera para en siguiente fases buscar "cotas más altas".
En la comparecencia se oficializó también que el portugués Jesualdo Ferreira, quien dirigió las últimas temporadas al Oporto de su país, será el entrenador del Málaga la venidera campaña, en la que sustituye en el banquillo a Juan Ramón Muñiz.
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