La Real Sociedad ha confirmado la venta de Illarramendi al Real Madrid. El club blanco recibe un mediocampista creativo, de toque y con movilidad. Su llegada confirma la intención de Carlo Ancelotti de hacer jugar a su equipo al ataque, con jugadores que puedan controlar el balón y retenerlo durante gran parte del encuentro. Sin embargo, la obsesión veraniega de los blancos por fichar centrocampistas le ha llevado, de momento, a olvidarse de las bandas.
Con Illarra, ya son siete los jugadores que podrían desempeñarse en los tres puestos del medio del campo, suponiendo que Carletto mantenga su idea de jugar con un sistema de 4-2-3-1. Xabi Alonso, Khedira, Modric, Isco, Casemiro y el propio Illarramendi podrían jugar en el doble pivote, si bien es cierto que tanto el andaluz como el croata pueden adelantar su posición para jugar de mediapunta. Por su parte, Özil y Kaká -con quien Ancelotti parece contar- se postulan como favoritos para la titularidad como enganches.
Así, parece que el Real Madrid ha cubierto de sobra una zona del campo en la que en los últimos tiempos flojeaba bastante. Con siete jugadores para tres posiciones, todos podrían llegar al final de temporada en buen estado de forma y no tan agotados como en la época de Mourinho.
Empero, tanto empeño en las posiciones del medio del campo ha hecho que el club de la Castellana se olvide de las bandas, posición imprescindible para un equipo con una transición ofensiva rapidísima. A día de hoy, tan sólo Di María y Cristiano Ronaldo pueden jugar en la banda. La venta de Callejón al Nápoles ha dejado bajo mínimos los carriles laterales del Bernabéu. Quizá Gareth Bale sea el comodín que esconde Florentino Pérez para cerrar su plantilla y reventar el mercado de fichajes.
En caso de que el galés no vista de blanco la próxima temporada, Carlo Ancelotti podría variar su esquema y virar hacia un sistema de juego más parecido al del Barcelona. Con la sobrepoblación de mediocampistas, ver un 4-3-3 en la Castellana el año que viene no sería nada descabellado. Además de Ronaldo y Di María, Benzemá, Isco, Özil y Kaká podrían flanquear en las bandas al delantero centro.
Aún queda un mes y medio para que se cierre el mercado de verano. Tiempo de sobra para que el Real Madrid acabe de apuntalar una plantilla que, de momento, ofrece calidad y muchas variantes, aunque también algunas incógnitas. Quizá el desembarco de algún jugador de aquí al 31 de agosto permita vislumbrar al nuevo conjunto de Carlo Ancelotti.
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