El Manresa quiere cambiar su suerte en Sevilla

Manresa (Barcelona), 5 ene.- El Bàsquet Manresa visita mañana (20.00 horas) la pista del Cajasol, un rival directo en la zona baja de la clasificación y frente al que intentará cambiar su suerte y lograr la tercera victoria de la temporada en la Liga Endesa.

Pese a las urgencias de uno y otro por ganar partidos, ambos equipos viven situaciones bien diferentes. Los dos han mejorado sus prestaciones durante el último mes, pero mientras los sevillanos han conseguido ganar tres de sus últimos cinco partidos con la ayuda de nuevos fichajes, los catalanes acaban de perder a Assignia como patrocinador.

Es el Manresa un equipo desafortunado, que sigue estancado en las dos victorias. Las últimas derrotas de los catalanes, ante el Valencia y el Canarias, han sido por muy pocos puntos y con opciones hasta el último segundo.

Para romper con el gafe, el técnico del Manresa, Jaume Ponsarnau, propone "ser proactivos". "No queremos esperar que pasen las cosas. No solo se trata de mejorar sino también de ganar", señaló

Ponsarnau explica que las victorias que se les han escapado al equipo en los últimos partidos, "no han sido" porque no hayan mejorado. "Creo que lo hemos hecho, sino por factores que nos cuesta controlar porque aun somos un equipo inexperto".

El entrenador del Bàsquet Manresa destaca que el Cajasol "es un equipo muy físico, con mucha altura, mucha fuerza y que ha basado su mejora en la defensa, pues son muy incómodos para el ataque rival".

Ponsarnau también elogia el contraataque de los de Aíto García Reneses: "Es un equipo increíble aprovechando las recuperaciones, ya que casi siempre acaban en canasta. Se abren muy bien para correr, enseguida crean buenas líneas de pasada, tienen velocidad y pueden acabar tanto de fuera como cerca de la canasta".

Sobre el ataque del conjunto andaluz, señala que "aún está en construcción, pero tienen mucho talento y conociendo Aíto García Reneses, saben que cada vez tendrán más calidad".

Los catalanes, que no ganan en Sevilla desde el 2009, llegarán al partido de mañana con dos de sus jugadores importantes 'tocados' aunque se espera que puedan jugar. Troy DeVries sufrió un esguince en la muñeca derecha en el entrenamiento del miércoles, mientras que Charles Ramsdell se ha perdido alguna sesión de preparación por un virus intestinal.