El Wolfsburgo apunta a ser la gran víctima colateral del escándalo Volkswagen

    • El destino del club de fútbol de Wolfsburgo y el del constructor están íntimamente ligados.
    • Bild afirmó que Volkswagen podría reducir su apoyo al club a 30 millones por año en caso de la salida del presidente.
Wolfsburg players celebrate after Wolfsburg's Dutc
Wolfsburg players celebrate after Wolfsburg's Dutc

El escándalo de los motores diésel trucados y la dimisión de su presidente Martin Winterkorn, gran aficionado al fútbol, hacen temer a los hinchas de los 'Lobos' que el gigante automovilístico reduzca sus inversiones en la entidad. El destino del club de fútbol de Wolfsburgo y el del constructor están íntimamente ligados.

Esta ciudad del norte de Alemania está construida por entero alrededor de la sede de Volkswagen, propietaria del 100% del club y patrocinador principal desde los años cincuenta.

El grupo mantiene el secreto sobre sus inversiones, pero la prensa estima que inyecta unos 100 millones de euros cada año en el equipo verdiblanco, para que pueda brillar al máximo nivel, con el logotipo "VW" en el pecho.

El ya expresidente Martin Winterkorn, que llegó al cargo en 2007, es un hincha declarado de fútbol y desde su llegada aumentó las inversiones destinadas a cuestiones deportivas. Winterkorn fue portero 'amateur' en su juventud y era muy frecuente verle siguiendo los partidos del Wolfsburgo en el estadio, con una bufando verde al cuello.

Su salida de la presidencia se precipitó esta semana cuando estalló el escándalo que ha hecho temblar los cimientos del hasta ahora sólido gigante alemán. Volkswagen se expone ahora a fuerte multas y ya ha bloqueado 6.500 millones de euros para hacer frente a las consecuencias judiciales que puede tener este caso en todo el mundo.

Por coincidencia o víctimas del estrés que rodea al club, el Wolfsburgo ha tenido también una semana negativa, marcada por la derrota 5-1 contra el Bayern de Múnich en la sexta jornada de la Bundesliga.Reducirá el apoyo al club

El sucesor de Winterkorn al frente de Volkswagen se conoció el viernes y es el expatrón de Porsche Matthias Müller, que durante un tiempo también soñó con una carrera profesional en el fútbol, pero cuyas pasiones deportivas "se dirigen más a los deportes automovilísticos", estima en declaraciones a la AFP Christoph Breuer, economista del deporte en la Universidad de Colonia.

La presión financiera debería traducirse en "un llamamiento más fuerte para un programa de ahorro" en el grupo, según Breuer. Cuando el patriarca del grupo Ferdinand Piëch intentó desembarazarse de Winterkorn a principios de año, el tabloide Bild afirmó que Volkswagen podría reducir su apoyo al club a 30 millones por año en caso de la salida del presidente.

Una reducción tras drástica pondría muy en peligro el potencial del Wolfsburgo, campeón de Alemania en 2009 y acostumbrado a plantar batalla a los grandes del país.

La reducción de presupuesto del club impediría al equipo hacer fichajes importantes, como los de los brasileños Naldo y Luiz Gustavo o el campeón mundial Andreas Schürrle, que forman actualmente parte de su palntel.

La participación en las competiciones europeas también se vería amenazada, pero la repercusión mediática internacional no es el principal motivo de Volkswagen para su compromiso con el equipo emblema de Wolfsburgo.Un futuro deportivo incierto

Si el grupo invierte en el club no es para vender más coches, sino para "hacer Wolfsburgo más atractivo" para sus empleados y convencerles de trabajar en esta ciudad de 124.000 habitantes sin grandes atractivos ni una gran oferta cultural, explica Breuer.

Según el experto, "el Wolfsburgo no va a desaparecer del mapa del fútbol, pero podrían verse relegados a figurar en la mitad de la clasificación de la Bundesliga". Por parte del club se niegan a ponerse catastrofistas. El escándalo Volkswagen "no tiene un impacto inmediato" en el club, asegura el director deportivo Klaus Allofs.

La participación en el Wolfsburgo no es la única del grupo, cuya matriz y filiales apoyan a 17 clubes profesionales. Su marca de coches premium Audi es accionista del Bayern de Múnich y del Ingolstadt. Las preocupaciones en el fútbol alemán son "muy exaqeradas", estima Sascha Gommel, analista en el Commerzbank.

"Volkswagen tiene mucho por hacer para mejorar su imagen" y "volver a ganarse la confianza del público", dice, apuntando que ahorrar a costa del Wolfsburgo o de los otros clubes, de gran visibilidad, sería contraproducente.

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