Eloy Teruel rozó el podio en puntuación

Redacción deportes, 25 mar (EFE).- El español Eloy Teruel se quedó a un paso del podio en la prueba de puntuación masculina de los Mundiales de ciclismo en pista de Pruszkow (Polonia), al clasificarse cuarto en una carrera en la que se impuso el australiano Cameron Meyer.

Meyer ganó el oro con 24 puntos, dos más que el danés Daniel Kreutzfeldt, plata, y tres por delante del británico Chris Newton, bronce.

Eloy Teruel, que prácticamente toda la carrera estuvo virtualmente en el podio. acabó cuarto con 17 y justo por delante del bielorruso Vasili Kiryienka, que defendía el título.

Tras sumar dos puntos en las primeras vueltas, en las que estuvo muy activo, quizás en exceso, fue en una escapada de cuatro corredores desde la vuelta 55 a la 73 cuando el murciano ganó sus dos sprints y, con 12 puntos, pasaba a comandar la prueba.

A partir de ese momento, el español pasó a ser el más vigilado, en especial por Newton.

"No entiendo cómo ha corrido el inglés, porque ha estado muy pendiente de mí y no tanto de otros corredores y pienso que ha perdido la carrera por ello. Y me ha dejado la tostada a mí, cuando Meyer era un corredor muy peligroso y ahí ha estado al final", señalo Teruel.

Desde ese momento hasta el final, Teruel no pudo sumar tantos puntos como sus rivales -sólo cinco, con un segundo en el noveno sprint, con un cuarto en el undécimo y el duodécimo-, y se vio relegado a la cuarta plaza, informa la federación española.

"Al final me han faltado fuerzas para sumar algún punto que me hubiera permitido entrar en las medallas", dijo el murciano.

"Aunque siempre que ves el podio tan cerca te quedas un poco frustrado. La verdad es que es un resultado para estar contento, muy contento. Si volviera a correr, haría lo mismo porque tenía que arriesgar corriendo así", explicó.

"Ahora tengo un día para descansar y darlo todo en la persecución por equipos", concluyó Teruel.

En velocidad por equipos, y con un tiempo de 45.771, el trío formado por Álvaro Alonso, Hodei Mazkiarán y David Alonso acabó en la duodécima posición.

Francia y Gran Bretaña marcaron los dos mejores tiempos en la clasificatoria que les llevó a la final, en la que los galos volvían a ser nuevamente superiores (43-510 a 43-869). Alemania se hizo con el bronce al superar a Australia.

En 500 metros femeninos, la catalana Helena Casas terminó vigésima en una prueba en la que se impuso, con récord del mundo incluido (33.296), la gran favorita, la lituana Simona Krupeckaite, que relegó a la plata a la australiana Anna Meares (33.796), quien minutos antes se había quedado a apenas dos décimas de su récord del mundo que perdería poco después. Victoria Pendleton se hizo con el bronce (34.102).

La tarraconense Casas marcó un tiempo de 36.319, lejos del récord de España que ella misma posee (35.801).

En los 3.000 metros, la neozelandesa Alison Shanks se impuso en la final a la británica Wendy Houvenaghel, que había sido la mejor en la ronda clasificatoria. El bronce fue para la lituana Vilija Sereikaite.

En esta prueba, la española Leire Olaberría se clasificó novena, con récord de España incluido, en la ronda previa. La marca de 3.41.176 rebaja los 3.41.557 que tenía la guipuzcoana desde el Mundial del año pasado en Manchester.

Gema Pascual fue vigésima en la clasificatoria con un tiempo de 3.56.365. Tras marcar unos buenos tiempos en los 1.000 (1.15.722) y 2.000 (2.23.449), la madrileña se vino abajo en el último kilómetro.