Espanyol, el sabor amargo del trabajo cumplido

  • El Espanyol cierra la temporada con 42 puntos y la permanencia en Primera asegurada, el objetivo que se marcó para esta campaña al principio de curso, pero que sabe a poco después de la nefasta recta final del combinado catalán, en la que ha sumado dos puntos de 24 posibles.

Barcelona, 18 may.- El Espanyol cierra la temporada con 42 puntos y la permanencia en Primera asegurada, el objetivo que se marcó para esta campaña al principio de curso, pero que sabe a poco después de la nefasta recta final del combinado catalán, en la que ha sumado dos puntos de 24 posibles.

La temporada 2013-14 termina con una derrota en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid y con la despedida de Javier Aguirre del banquillo.

El entrenador blanquiazul acaba su contrato el próximo 30 de junio y no renovará. Ambas partes entienden que ha acabado un ciclo y trabajan en la siguiente, por caminos separados.

Nadie quiere que se repita lo que ya viene siendo habitual en el Espanyol: inicios de curso ilusionantes y desenlaces que fulminan la ilusión de la grada. En esta ocasión, el cuadro catalán ha pasado de soñar con los puestos europeos de la clasificación a mirar hacia abajo para calcular con exactitud el riesgo de descenso.

El bloque del preparador mexicano, de todos modos, ha dejado pinceladas positivas. Cuando ha mostrado su mejor versión, una cara intensa, aguerrida, con disciplina táctica e incisivo arriba, ha conseguido ilusionar a los suyos. Sin ir más lejos, venció en la primera vuelta al Atlético de Madrid, flamante campeón de Liga.

Cuando la permanencia ha sido virtual, el Espanyol ha bajado el ritmo, ha olvidado su ADN y eso le ha pasado factura en forma de caída libre en la tabla. El vestuario ha defendido siempre su implicación en cada jornada, aunque la grada expresó su veredicto con silbidos en el último partido disputado en casa.

Las mejores noticias a nivel deportivo han llegado en el plano individual: la consolidación del portero Kiko Casilla, grandes clubes siguen al meta, y la excelente temporada del delantero Sergio García. El capitán ha firmado su récord de dianas en Primera, doce en Liga y una en Copa del Rey.

Pese a todo, la plantilla, confeccionada con 750.000 euros con futbolistas cedidos y a coste cero, ha demostrado su calidad y capacidad. El objetivo era la permanencia y, visto con perspectiva, el equipo nunca ha sufrido por ella. Aunque siempre quedará la duda de qué hubiera pasado con una recta final menos dramática.

En cuanto a lo social, el Espanyol está preocupado por cómo la tendencia de los cursos recientes afectará a la pérdida de abonados. La intención de la entidad es recuperar los 30.000, aunque a los pobres resultados del equipo se suma una crisis económica que desplaza, para muchos, al fútbol en la lista de prioridades. EFE.

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