Kimi Räikkönen es, probablemente, el piloto más extravagante de todo el paddock. Sin embargo, eso no quita que el finlandés sea un gran conductor y, sobre todo, muy regular. Gracias a esa cualidad fue campeón del mundo en 2007 y gracias a ella también, ha inscrito su nombre en uno de los récords históricos de este deporte.
El finés es, desde este fin de semana, el piloto que más carreras consecutivas ha completado puntuando. Con el Gran Premio de Canada de este fin de semana son ya veinticuatro. Desde que acabara decimocuarto en China el año pasado, Kimi no conoce otro resultado que no sea acabar entre los diez primeros puestos.
Gran parte de la culpa la tiene su equipo, Lotus-Renault, que le ha proporcionado un coche resistente y competitivo, que le ha permitido no sólo pelear por entrar en los puestos de puntos, sino luchar por victorias y podios. De hecho, en este año y dos meses, el finés ha sumado dos triunfos, seis segundos puestos y tres terceros.
Tan sólo en dos ocasiones (Brasil 2012 y hace un par de semanas en Mónaco) su racha estuvo a punto de romperse, pero en ambas ocasiones logró finalizar décimo y sumar un puntito. Especial mención merece la carrera monegasca, en la cual adelantó a cinco rivales en las últimas vueltas para lograrlo.
Hasta hoy, el récord pertenecía en solitario a Michael Schumacher. El alemán logró terminar toda una temporada en los puntos (en 2002, cuando el Ferrari era insuperable). A esas diecisiete pruebas hay que sumar las cinco del final del año anterior y las dos de la temporada siguiente. La racha del heptacampeón se cortó en Brasil, donde una tromba de agua cayó durante la carrera y el alemán cometió un error que le obligó a abandonar en la vuelta 27.
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