Fabiana Murer, el último Mundial de la Isinbayeva brasileña

  • A sus 34 años, la pertiguista Fabiana Murer se prepara para su último Mundial al aire libre, el de Pekín (22-30 de agosto), donde intentará repetir el gran éxito de su carrera, el oro que consiguió hace cuatro años en el Mundial de Daegu.

Aquel 30 de agosto de 2011 sigue grabado como el mayor éxito del atletismo brasileño, que nunca antes, y nunca desde entonces, había conseguido una medalla de oro en el Mundial.

Su triunfo en Corea del Sur fue con un 4,85 que ya había conseguido en el Iberoamericano de San Fernando (España) en 2010 y que es su mejor marca personal.

En 2016, Murer buscará la despedida soñada en los Juegos Olímpicos de Rio, pero antes de llegar a ese emotivo momento ha diseñado su temporada de 2015 pensando en el Mundial de Pekín, donde será una de las grandes favoritas a las medallas.

Llega a China avalada por la cuarta mejor marca de la temporada, el 4,80 metros que alcanzó en junio en Nueva York, y a once centímetros de la mejor marca de lo que va de año, conseguida por la cubana Yarisley Silva (4,91 metros), la mujer que le privó el pasado mes del oro en los Juegos Panamericanos de Toronto, donde Murer se quedó con la plata.

En el año 2014, en el que no hubo ni Mundial al aire libre ni Juegos Olímpicos, Murer tuvo un papel protagonista y se llevó la victoria final en su prueba, el salto con pértiga, en el circuito de la Liga de Diamante, el que agrupa a las principales reuniones del atletismo internacional.

Acabó el pasado año además habiendo conseguido las tres mejores marcas (4,80, 4,76 y 4,72), por delante de la estadounidense Jennifer Suhr, la vigente campeona olímpica.

Pero para hacer buenos los augurios de los últimos meses, Murer tendrá que superar la mala fortuna que parece perseguirle en las últimas grandes citas, desde su título mundial de Daegu.

En los Juegos Olímpicos de Londres-2012 fue la gran decepción al no poder ni siquiera superar las clasificaciones, fallando tres veces ante la barra de 4,55 metros, molestada por el viento en la capital británica.

En el Mundial de Moscú-2013 defendía su corona y sí que pudo clasificarse para la final, donde volvió a fallar y se quedó con un 4,65 metros discreto para sus posibilidades, que le deparó un quinto puesto, en una prueba donde se coronó la 'zarina' Yelena Isinbayeva con un 4,89 metros ante su público. Murer acabó aquella competencia entre lágrimas, muy disgustada por haber perdido el título mundial.

"Me da pena perder el título mundial. He ganado dos Mundiales en mi carrera, uno bajo techo (en Doha en 2010) y otro al aire libre, pero posiblemente el de Daegu es el momento más importante de mi carrera", contó a la AFP aquella noche, antes de abandonar el estadio Luzhniki.

El último Mundial en el que participó la brasileña fue el de pista cubierta de Sopot, en marzo de 2014, y allí quedó en cuarta posición con 4,70 metros, la misma marca con la que finalizaron las tres medallistas de esa prueba, en la que el oro fue para la cubana Yarisley Silva.

La garrochista emblemática de Brasil, la 'Isinbayeva' de Campinas, espera que las lágrimas de tristeza de Moscú sean de alegría en Pekín, para despedirse a lo grande de la competición y llegar como campeona del mundo a Rio-2016, la barra que se ha fijado en la recta final de su carrera.

dr/jt

Mostrar comentarios